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La película también obtuvo premios en Amsterdam, Holanda, y en Santiago de Chile.
El Festival de Gramado, un pequeño municipio de la región serrana del sureño estado de Río Grande do Sul, es el más importante del calendario cinematográfico brasileño y se celebra desde 1973. Sus estatuillas se denominan Kikitos. Emilio Barreto ya había ganado este premio en 2016 por su actuación en la coproducción argentina-paraguaya “Guaraní”.
Además de obtener el Kikito a la Mejor Película, “Las Herederas” también ganó el premio a Mejor guión y Marcelo Martinessi fue elegido como el Mejor Director. Martinessi no pudo recibir el galardón del certamen porque se encontraba en Europa donde esa noche también obtuvo el premio como mejor director en el World Cinema Amsterdam.
La película, que aborda el amor entre mujeres en la tercera edad también ganó el Kikito a mejor actriz que fue otorgado a las tres protagonistas del filme: Ana Brun, Margarita Irún y Ana Ivanova.
El filme también se llevó los Kikitos del público y de la Crítica. “En una rara sintonía entre público y crítica el filme alcanzó el gusto de la platea de Gramado”. dijo el diario de Porto Alegre Zero Hora.
O Globo de Rio de Janeiro calificó de “bellísima” a la película paraguaya.
“El público nos trató como reinas y nos amó intensamente. Vamos a llevar a Gramado siempre en el corazón, dijo Margarita Irún, durante la premiación.
La película fue exhibida el domingo 19, en la segunda noche del festival. Según Zero Hora ya corría el rumor de que Brun sería la vencedora en la 46ª edición de este evento. Pero la sorpresa fue grande al dividir el premio entre las tres protagonistas.
“Estamos muy contentas porque este premio entiende que un trabajo cinematográfico es colectivo, inclusive la construcción de un personaje. Este reconocimiento triple es muy importante. El trabajo cinematográfico es hecho por gente visible e invisible en la pantalla”, comentó Ana Ivanova, al recibir su Kikito. Ana Brun no pudo estar en la ceremonia.
Los otros premios
El premio Especial del Jurado fue para “Averno”, una coproducción de Uruguay y Bolivia dirigida por el boliviano Marcos Loayza que relata el viaje que debe emprender Tupah, un joven lustrabotas para buscar a su tío extraviado en un mundo lleno de seres de la mitología andina. El filme también obtuvo el galardón a Mejor Fotografía que fue entregado al uruguayo Nelson Waisntein.
El Kikito a Mejor Actor fue entregado a Néstor Guzzini, por “Mi Mundial”, la ópera prima del uruguayo Carlos Morelli, basada en el libro del mismo nombre de Daniel Baldi, que relata la historia de un adolescente de 13 años que promete como futbolista pero cuya vida pierde el rumbo mientras más entra en el mundo profesional del deporte.
En el apartado nacional, “Ferrugem”, de Aly Muritiba, que relata el drama de una adolescente por una foto comprometedora que fue revelada en las redes sociales, fue elegida como Mejor Película de largometraje brasileño de esa edición.
También se llevó los Kikitos a Mejor Guión y Mejor Diseño de Sonido. No obstante, para la crítica la mejor película brasileña fue “Benzinho” un drama sobre las dolorosas separaciones familiares que son necesarias para que uno de los involucrados cumpla el sueño del progreso y bienestar lejos de sus orígenes.
En Santiago de Chile, la película paraguaya fue premiada en el Sanfic, el festival internacional de cine de la capital chilena.