Los “nuevos” píxeles podrían utilizarse en pantallas tan grandes que podrían cubrir edificios enteros de forma sostenible, ya que, además de más baratos, no necesitarían un suministro constante de energía. Un píxel es la unidad básica de color que compone una imagen digital y cuyas dimensiones determinan la calidad de la imagen: a menor tamaño, mayor resolución. El nuevo invento, además de abaratar el proceso de producción, no necesita energía constante para mantener el color, lo que hace que las grandes pantallas sean viables y sostenibles.
Estos nuevos minipíxeles son capaces de atrapar la luz entre un grano de oro y una superficie reflectante.
