BARCELONA (AFP).La pequeña ciudad española de Sant Cugat del Vallés, en la periferia de Barcelona (noreste), ha instalado un semáforo en el suelo para aquellos peatones que pasean por la calle mirando el teléfono móvil.
El semáforo, que se puso en marcha el jueves, consiste en una franja de luces de color rojo ubicadas al final de la acera, que se enciende cuando está prohibido el paso a los peatones, explicó el ayuntamiento en un comunicado. De momento, estas luces se han instalado únicamente en una intersección, una de las más transitadas de este ciudad residencial de 87.000 habitantes, pero podrían extenderse a otros cruces concurridos.
