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"Asunción" fue uno de esos clubes que, a pesar de su efímera participación en un torneo de Primera División, permaneció imborrable en los recuerdos de quienes palpitan, viven y vibran con el fútbol desde comienzos de la década del 50. Es más, a pesar de haber desaparecido como club militante en los torneos de la Liga Paraguaya de Fútbol, su campo de juego ubicado sobre la Avenida Artigas, en un extenso predio ubicado frente al entonces inexistente Sanatorio La Costa, fue escenario de trepidantes encuentros de fútbol, de ligas de barrio y hasta de los juegos universitarios, en su época de esplendor.
Fue fundado hace 105 años, el 15 de agosto de 1906, poco después de la fundación de la Liga, con el nombre de Asunción Football Club en casa del señor Andrés Acosta, sita en las calles Entre Ríos, Vía Férrea y Venezuela, actualmente Avda. Artigas, con la presencia, entre otros de Juan Ramón Acosta, M. Pérez, Ramón Caballero, Juan José Jiménez, Silvano Fretes, M. Mazó. A. González, D. Mazó, L. González, L. Brítez, Pedro Cañiza y Pablo Dragotto.
Adoptaron como colores distintivos el amarillo y el rojo (como la actual camiseta de Sport Colombia), a franjas verticales. Durante muchos años militó en la Liga Amateur para luego ser aceptado en la Liga Paraguaya, en la llamada División Intermedia (Segunda División). Lo curioso es que luego de casi veinte años sin ascenso ni descenso, justo en el año que se reimplantó ese sistema, el Asunción FBC ganó el único título de su historia, lo cual le dio el derecho a jugar en Primera División. Lo hizo en el año 1949. Ascendió en 1950, terminó último en la tabla de posiciones y volviendo a descender para desaparecer, un tiempo después, para siempre.
Sin embargo, en su seno nació uno de los más grandes futbolistas de la historia: Delfín Benítez Cáceres. Otro grande, Francisco Sosa, también empezó su carrera allí, para brillar luego en Cerro Porteño. Hoy sigue en la brecha deportiva, contribuyendo para el bienestar de una populosa barriada.
99 años de Atlético Tembetary
La Asunción de principios del Siglo XX se extendía hacia los suburbios. La ruta que conducía a Caacupé y a Barrero Grande (Luego Eusebio Ayala) se convertía en un eje de desarrollo, y fueron naciendo nuevos barrios. Hacia el kilómetro 3 de esa ruta, en la cumbre de una empinada cuesta, se encontraba una gran arboleda, sitio de recreo de pobladores, rodeado de numerosas capueras, abiertas en la tierra roja, y rodeadas por verdes arboledas.
Tal vez por eso, el 3 de agosto de 1912, cuando se decidió fundar un club de fútbol, le pusieron por nombre "Bermejo" aludiendo al color de la tierra, en el corazón del naciente barrio de Tembetary. La Primera Comisión Directiva la integraron los siguientes señores fundadores: Jacinto P. Rivarola, Marcelino Meza, José D. Rojas, Jerónimo Pesoa, Rafael Meza, Manuel Meza, Nicolás Rojas, Ildefonso Caballero, Bonifacio Godoy, Bartolomé Fernández, Rafael Ríos, y Félix González.
Sin embargo, la historia de la fundación no estaba terminada. Los socios consideraron que el nombre "Bermejo" no reflejaba la realidad ni el sentir del vecindario, decidieron constituir una nueva asamblea, el 21 de marzo de 1920, en la cual se resolvió cambiar el patronímico por el de "Club Atlético Tembetary" con el que se lo conoce hasta nuestros días.
El nombre "Tembetary" por el que se conocían el barrio y el club deviene de la presencia de una variedad de árboles espinosos y aromáticos que daban sombra en abundancia que los caminantes y viajeros de carreta y a caballo gozaban. Ese árbol se llama Tembetary. El color de la casaca del club, rojo y verde en franjas verticales, esta también inspiró en ese árbol, cuyo verde follaje contrastaba con grandes y agudas espinas de color rojo magenta.
El club fue parte de la historia grande los clubes de primera, en su cancha de 85 x 45 metros, donde los más pintados agachaban la cabeza. Fue allí donde Benjamín Laterza experimentó el "cerrojo" que con los años se popularizaría especialmente en Italia.
Por motivos nunca bien aclarados, la directiva de Epifanio Rojas vendió la sede del barrio y se trasladó a Ypané. Hoy ese complejo deportivo donde se formó Nelson Haedo Valdez- está a punto de ser de nuevo transferido, y no se sabe cual será el destino de este histórico club del fútbol paraguayo.
Fue fundado hace 105 años, el 15 de agosto de 1906, poco después de la fundación de la Liga, con el nombre de Asunción Football Club en casa del señor Andrés Acosta, sita en las calles Entre Ríos, Vía Férrea y Venezuela, actualmente Avda. Artigas, con la presencia, entre otros de Juan Ramón Acosta, M. Pérez, Ramón Caballero, Juan José Jiménez, Silvano Fretes, M. Mazó. A. González, D. Mazó, L. González, L. Brítez, Pedro Cañiza y Pablo Dragotto.
Adoptaron como colores distintivos el amarillo y el rojo (como la actual camiseta de Sport Colombia), a franjas verticales. Durante muchos años militó en la Liga Amateur para luego ser aceptado en la Liga Paraguaya, en la llamada División Intermedia (Segunda División). Lo curioso es que luego de casi veinte años sin ascenso ni descenso, justo en el año que se reimplantó ese sistema, el Asunción FBC ganó el único título de su historia, lo cual le dio el derecho a jugar en Primera División. Lo hizo en el año 1949. Ascendió en 1950, terminó último en la tabla de posiciones y volviendo a descender para desaparecer, un tiempo después, para siempre.
Sin embargo, en su seno nació uno de los más grandes futbolistas de la historia: Delfín Benítez Cáceres. Otro grande, Francisco Sosa, también empezó su carrera allí, para brillar luego en Cerro Porteño. Hoy sigue en la brecha deportiva, contribuyendo para el bienestar de una populosa barriada.
99 años de Atlético Tembetary
La Asunción de principios del Siglo XX se extendía hacia los suburbios. La ruta que conducía a Caacupé y a Barrero Grande (Luego Eusebio Ayala) se convertía en un eje de desarrollo, y fueron naciendo nuevos barrios. Hacia el kilómetro 3 de esa ruta, en la cumbre de una empinada cuesta, se encontraba una gran arboleda, sitio de recreo de pobladores, rodeado de numerosas capueras, abiertas en la tierra roja, y rodeadas por verdes arboledas.
Tal vez por eso, el 3 de agosto de 1912, cuando se decidió fundar un club de fútbol, le pusieron por nombre "Bermejo" aludiendo al color de la tierra, en el corazón del naciente barrio de Tembetary. La Primera Comisión Directiva la integraron los siguientes señores fundadores: Jacinto P. Rivarola, Marcelino Meza, José D. Rojas, Jerónimo Pesoa, Rafael Meza, Manuel Meza, Nicolás Rojas, Ildefonso Caballero, Bonifacio Godoy, Bartolomé Fernández, Rafael Ríos, y Félix González.
Sin embargo, la historia de la fundación no estaba terminada. Los socios consideraron que el nombre "Bermejo" no reflejaba la realidad ni el sentir del vecindario, decidieron constituir una nueva asamblea, el 21 de marzo de 1920, en la cual se resolvió cambiar el patronímico por el de "Club Atlético Tembetary" con el que se lo conoce hasta nuestros días.
El nombre "Tembetary" por el que se conocían el barrio y el club deviene de la presencia de una variedad de árboles espinosos y aromáticos que daban sombra en abundancia que los caminantes y viajeros de carreta y a caballo gozaban. Ese árbol se llama Tembetary. El color de la casaca del club, rojo y verde en franjas verticales, esta también inspiró en ese árbol, cuyo verde follaje contrastaba con grandes y agudas espinas de color rojo magenta.
El club fue parte de la historia grande los clubes de primera, en su cancha de 85 x 45 metros, donde los más pintados agachaban la cabeza. Fue allí donde Benjamín Laterza experimentó el "cerrojo" que con los años se popularizaría especialmente en Italia.
Por motivos nunca bien aclarados, la directiva de Epifanio Rojas vendió la sede del barrio y se trasladó a Ypané. Hoy ese complejo deportivo donde se formó Nelson Haedo Valdez- está a punto de ser de nuevo transferido, y no se sabe cual será el destino de este histórico club del fútbol paraguayo.