El Ciclón impidió que Libertad extienda su ventaja en la punta del campeonato y con su triunfo de un gol contra cero, pone la cima no solo a su alcance, sino también de otros equipos, como Guaraní.
En el recuento general, Cerro tuvo el predominio del juego, aunque Libertad también generó oportunidades, en un partido que por momentos fue de ida y vuelta, pero con poca precisión para la definición.
El lateral izquierdo cerrista Joel Giménez fue una de las revelaciones. Este opacó al habilidoso, Antonio Bareiro, quien no pesó en el conjunto gumarelo como otras veces.
Con Bareiro prácticamente anulado, tampoco tuvo trascendencia la tarea del goleador, Salcedo, pese a su voluntad.
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Quien tenía la batuta del fútbol fue el volante azulgrana, Rodrigo Rojas. Este remató de primera dentro del área un centro de Giménez, apenas comenzado el encuentro, pero su disparo dio de lleno en el arquero Muñoz, quien se había quedado parado en medio de su arco. Cerro tuvo ocasiones para anotar en el primer tiempo, pero después de la media hora de juego, fue Libertad el que estuvo más cerca. El juvenil Valiente tuvo dos de las buenas frente al arco de Antony Silva, pero una la erró y en la otra encontró el cruce del defensor cerrista Mauricio Victorino.
La más clara sensación de gol en la primera etapa, por la jugada y la definición, la tuvo Cerro. Jorge Rojas habilitó a Josué Colmán, a espaldas de Salustiano. El 10 del Ciclón enganchó dentro del área y su remate de zurda rozó el travesaño y sacudió la parte exterior de la red, provocando en el ansioso público azulgrana, un grito de gol truncado. En el segundo tiempo se movieron las piezas en uno y otro bando. Rodrigo Rojas siguió siendo el de mayor presencia en el área rival en Cerro y al recibir dentro de ella un pase largo, sufrió la falta de Muñoz, con un puño, que Mereles sancionó con la pena máxima. Del penal se encargó Velázquez, quien desde los doce pasos, como en los antiguos duelos, tumbó a Libertad.