El órgano punitivo de la FPFS estudió detenidamente los hechos ocurridos en Concepción, el 14 de febrero pasado, en el partido en el que el local disputaba con Belén. En aquella ocasión, se registró un apagón en el estadio municipal Lengua Rague y que paralizó unos 20 minutos el juego. Esta situación creó suspicacias en el resultado del marcador, que finalmente fue de 9-1.
El Tribunal de Justicia Deportiva escuchó la declaración testifical de los árbitros, que no presentaron ningún informe respecto a lo sucedido con la lumínica, porque nadie les informó al respecto, como así también notas presentadas por San Bernardino (otro afectado) y Belén, y en consecuencia resolvió ratificar la clasificación de Concepción como mejor segundo de los cupos 15 y 16 para las finales del Nacional. El estadio Lengua Rague fue suspendido provisoriamente hasta que se solucionen los problemas eléctricos.