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El 3 de Febrero se dio el gran gusto de ganar a un Olimpia que pasa por momentos de mucha tensión y anoche fue preso nuevamente de su inestabilidad futbolística.
Diego Alonso, entrenador decano, en señal de vacilación, volvió a realizar modificaciones que nuevamente no le redituaron nada con respecto a los anteriores encuentros.
Fue el mismo equipo de la fecha pasada, con mucho vigor, aceleración y entusiasmo en el desarrollo de su fútbol, pero sin claridad en las líneas como para desequilibrar al rival.
El 3 de Febrero ratificó que su buen momento no es casual. Justificó plenamente su actuación y su triunfo final.
El cuadro de Rivera actuó de manera sobria e hizo frente en todo momento al elenco franjeado. Una línea defensiva muy sólida, un mediocampo en el que David Mendieta marcaba la diferencia y arriba con Colmán desequilibrante; fue una alineación que impuso respeto a su trabajo.
El Decano se acercó más en el desarrollo del primer tiempo. Tuvo posibilidades, como un gran remate de Acuña al inicio y después un tiro de José Montiel que pegó en uno de los postes.
El “3” también generó sus aciertos. Un cabezazo y un disparo de Mendieta inquietaron a Centurión.
Fue el cuadro del Este el que sorprendió en la parte final, cuando José Domingo Salcedo, cerca de su área, quitó larga la pelota que encontró muy bien ubicado a Colmán, que con gran serenidad venció a Centurión para el 1-0.
Con la presión a cuestas, Olimpia intentó y buscó la paridad, pero ya el 3 de Febrero controló bien el juego y se llevó un gran triunfo.