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El modesto pero guapo equipo de Rubio Ñu fue anoche gran protagonista ante Olimpia y venció con merecimientos a un venido a menos equipo franjeado, que cumplidas las cuatro fechas, poco o nada ofrece en cuanto a repertorio futbolístico.
Olimpia es lo mismo de siempre, sin ideas y mostrando un nivel de juego limitado. Anoche fue ampliamente superado por el rival que interpretó desde el inicio mismo del juego las orientaciones de su DT Pablo Caballero.
Rubio Ñu fue mejor y dio muestras claras de su calidad en los pocos minutos jugados. Entre Correa y Ortega adelante, bien asistidos por sus mediocampistas, el equipo de Trinidad se mostró peligroso y punzante, ocasionando llegadas muy inquietantes que no fueron definidas.
Olimpia, aunque no deslumbró, hizo lo suyo y tuvo sus buenos momentos, hasta que Derlis fue derribado por el arquero Morel y el juez Robles pitó la pena máxima, encargándose Ramírez del disparo que terminó en gol.
Rubio Ñu no se amilanó, al contrario, siguió jugando igual o mejor y Claudio Correa, tras centro de Mazacotte y fea salida de Centurión, de cabeza hizo el justiciero 1-1.
El predominio ñuense fue total en la complementaria ante un Olimpia que en forma inimaginable fue perdiendo totalmente terreno y quedando prácticamente a merced de los ñuenses.
Entre Correa y Lugo el cuadro de Trinidad perdió increíbles posibilidades de pasar al frente.
Pero los instantes superiores al final fueron bien materializados por los albiverdes. Gran acción de Lugo que cede el esférico a Correa y este con gran remate anotó el 2-1 ante un Olimpia que terminó sin poder reaccionar en el juego frente a un gallardo rival.