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Lejos del nivel de juego de tiempo pasado, el fronterizo usó bien la banda derecha para penetrar en terreno adversario.
La visita con mucho orden táctico, evidenció su propósito de explotar los espacios. Cáceres Cañete fue el indicado para las asistencias, mas al inició no encontró el hueco para hacerlo.
“Nico” Martínez apeló a la velocidad para dominar el balón, con un contragolpe letal. Ante la desesperada salida de Espínola, con un gestó técnico sutil, colocó la pelota al arco azulgrana.
Golpeado anímicamente, el local volvió al trabajo, con la misma necesidad de romper la línea de marcación que impuso la Academia. Noguera perseveró en su tarea de ingresar por derecha. Esta vez su envío fue bueno, Delvalle empalmó el balón y Villalba cerró para el empate transitorio, que devolvió la ilusión al equipo Battaglia, quien debutó como DT del elenco paranaense.
Morínigo no quiso complicaciones y envió a Prieto y Mazacotte a la cancha, a poco de haberse iniciado el segundo tiempo. El trámite del partido mejoró en ritmo, porque Nacional se abrió más y Cerro se tornó más luchador, aunque otorgó muchas concesiones.
Martínez, con su oportunismo, aprovechó una vacilación del fondo azulgrana para ensayar un disparo, nuevamente colocado con maestría para vencer a Espínola por segunda vez.
El local buscó la reacción, pero no tuvo recursos y Nacional se llevó los puntos.