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Con una nueva tónica futbolística tras el cambio de timonel, Olimpia ganó un partido clave para no perder terreno en la carrera hacia la cima.
El nuevo entrenador franjeado, Diego Alonso, tiene más apego al fútbol con salidas claras y toques rápidos antes que los pelotazos y pases largos. Con algunos cambios, aunque sin novedades resaltantes, el cuadro decano funcionó a sus anchas en el primer periodo, con un Derlis González encendido desde el comienzo hasta el final.
Sin dudas, Derlis fue la carta de triunfo que tuvo Olimpia en el partido, tanto para definir como para asistir por ejemplo a Diego Centurión, quien malogró muchas ocasiones de gol, algunas de ellas por tapadas salvadoras del arquero Roberto Jara, quien apareció como una de las caras nuevas en el equipo capiateño.
El cuadro visitante se mostró tímido y sin animarse a mucho en el primer tiempo, cediéndole terreno y balón a Olimpia, casi como oveja al matadero. Tras una jugada de Derlis, protestada por supuesta posición adelantada, vino un tiro de esquina del encargado de todos los tiros libres, Esteban Ramírez.
En el área chica atropelló el zaguero Carlos Rolón, para abrir el marcador con un cabezazo a los 14 minutos.
Capiatá no era oposición para el Franjeado. El arquero Víctor Centurión impulsó la pelota desde su área, la “peinó” Diego Centurión y la magia de Derlis González hizo el resto para anotar el segundo tanto olimpista a los 37 minutos.
El técnico Mario Jacquet apeló a los ingresos de Fabio Escobar y Gustavo Romero para la segunda etapa. Estos cambiaron radicalmente la actitud temerosa del primer tiempo. Con el correr de los minutos, Capiatá arrinconó a Olimpia en su campo y el arquero Centurión empezó a hacerse figura para mantener la ventaja.
A los 19’ del complemento, Escobar ganó de nuevo una pelota en ataque y al chocar con el arquero salió ganancioso empujándola a la red para el descuento. Óscar Ruiz tuvo varias oportunidades para empatar el partido, pero Capiatá había malgastado un tiempo y le salió caro.
Alonso empezó a “meter mano”
El técnico Diego Alonso, cuya mano empezó a notarse en el funcionamiento franjeado, señaló: “El partido estuvo dividido en dos. En el primer tiempo y hasta los diez del segundo el equipo estuvo bien, manejando la pelota y saliendo rápidamente. Convertimos dos goles, pudimos haber convertido más y en el segundo tiempo lógicamente bajamos de intensidad y eso es normal”.
Agregó: “Hemos tenido pocos días de trabajo y los jugadores sintieron el cambio de forma de jugar que deseamos”.
“Regalamos el primer tiempo”
Los capiateños lamentaron la nueva derrota del equipo ante Olimpia, pero valoraron la reacción del segundo tiempo.
El capitán, Alfredo Rojas, manifestó: “Lastimosamente jugamos muy mal el primer tiempo, conociendo la calidad de los jugadores que tiene Olimpia. Prácticamente regalamos el primer tiempo y eso nos costó el partido”.
Luego apuntó: “Perdimos nuevamente tres puntos, pero creo que lo que el equipo mostró en el segundo tiempo tiene que servirnos para seguir así y tratar de recuperar terreno en las próximas fechas”.