Olimpia hace sombra a la punta

Olimpia tuvo la mesa puesta para servirse cómodamente de un triunfo ante River Plate. A los 12’ llegó el anunciado primer gol, tras jugada de Benítez, peinada de Mendieta y definición de Roque, con golpe de muslo.

Era un monólogo franjeado. Eso hizo que dejara de lado lo práctico y se dedicara a buscar las acciones lujosas. River no existía como equipo. No tuvo buena marca, regalaba la pelota una y otra vez al rival y no pesaba en ataque. Obviamente, River no había llegado al arco de Centurión, hasta que el zaguero Lezcano se proyectó, lanzó un centro preciso para el cabezazo de Samudio que igualó el juego a los 31’.

Los tiros de esquina sirvieron para los tantos franjeados y de uno de ellos surgió el potente remate de Benítez, para el dos a uno con que terminó el primer tiempo. Al minuto del segundo, se acentuaron los errores arbitrales. De un penal dudoso, empató Caballero para River. Luego Mercado, quien tuvo como “asistente” a Julián Benítez, expulsó injustamente a Mareco, quedando River disminuido. Del intercambio de golpes, salió ganancioso el Decano, sufriendo más de lo previsto.