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Un remate de César Caicedo que iba directo al ángulo, al minuto de cumplirse el partido, que desvió espectacularmente Tobías Vargas, marcaba la importancia que iba a tener el colombiano, ayer en el equipo de General Díaz.
No obstante, el que comandó por varios minutos el desarrollo del juego fue Capiatá, con una buena tarea del “Ratón” Román, quien se mostró más lúcido y fresco que sus compañeros, con evidentes muestras de cansancio. Jorge Candia, con un cabezazo que se estrelló en el palo, casi le dio el gol a Capiatá.
Para la etapa final, Víctor Matta ingresó por Báez en el local y por derecha se conectó con Víctor Dávalos, y juntos crearon la gran jugada que terminó en el primer tanto de Caicedo, y nada más seis minutos después, nuevamente Matta le dio el pase perfecto al colombiano, para anote con remate cruzado el segundo tanto de las “Águilas”.
Con el ingreso de Ruiz Peralta, “Piojo” Ayala y Fabio Escobar, Capiatá buscó con todo el descuento, pero exageró en los pelotazos, y las veces que lo hizo con claridad, encontró bien parado al golero González, quien le tapó en dos ocasiones a Román.
Buen y oportuno triunfo, para salir de las últimas posiciones, y para viajar con mayor tranquilidad a Chile, para encarar la revancha por Copa Sudamericana.
Inicio de gresca en preferencias
Un intento de agresión se produjo en el sector preferencial del estadio Adrián Jara, que tuvo como protagonistas principales al preparador físico, Pedro Grance y un directivo local, con el titular de Capiatá, Óscar Barreto, apoyado por varios directivos.
A los capiateños no les gustaron los constantes gritos del profesional de General, hacia sus jugadores, y luego de agredirse con palabras y amenazas de “algún día irán a Capiatá”, intentaron agredir al preparador físico.