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Agónico primer triunfo solense
Con la entrada del mes de la primavera, Sol renació y consiguió, de forma agónica, su primera victoria en el torneo Clausura.
Parecía consumarse otro empate para el conjunto solense, que a lo largo del encuentro mostró pocas ideas como para aspirar al triunfo, salvo algunas llegadas que terminaron mal, con poca claridad.
Luqueño trabajó más la pelota, con la distribución de Julio Dos Santos, pero al igual que su rival, no tuvo profundidad ni resolución para definir las jugadas frente al arco adversario.
Hacia la parte final del primer tiempo, se produjeron algunas acciones frente a los dos arcos, que estuvieron cerca de convertirse en gol. Un tiro libre para Sol que cabecearon en el área Toledo y Mendieta, terminó con un remate de Acuña frente al arco, que se estrelló en el lateral Escobar. Luego, un “globo” de Junior Brítez logró desviar en última instancia el arquero Ortiz, de Sol.
Ya en el segundo tiempo, Ortiz volvió a desviar un fuerte remate de Diego Vera. A los 53’ se lesionó Toledo e ingresó Zeballos, para darle otra tónica al partido. Parecía redondearse el cero, pero en la última acción, no pudieron rematar Villagra ni Martínez, pero Zeballos lo hizo, con experiencia para el primer triunfo azul.
Nervios luqueños
El gol en la última jugada del partido, que significó la derrota de Luqueño frente a Sol, enervó a los auriazules.
Desde el mismo momento en que se produjo el gol de Zeballos, el arquero Tobías Vargas y otros apuntaron al lateral Juan Escobar, como el culpable de la acción previa. Tras el final y ya en el túnel, camino a vestuarios, Vargas volvió a increpar a Escobar y cuando la discusión subía de tono, intervino Julio Dos Santos, empujando a Vargas. El caso llamó la atención.