Visita no grata en Luque

No es ningún bolero, pero eso mismo fue lo que pasó con Luqueño. El cuadro auriazul a duras penas logró igualar el marcador uno a uno en el segundo tiempo y muy cerca del final tuvo un penal a su favor que pudo haber definido el juego en Luque.

Iban 38’ del complemento. Pensábamos que el ejecutante auriazul sería Claudio Vargas, pero el designado fue Di Vanni. Todo Luque palpitaba y el arquero visitante Francisco Olmedo, bailoteaba en su arco tratando de confundir al rematador. Y lo consiguió. Di Vanni disparó sin convicción y Olmedo detuvo el penal arrojándose hacia su palo izquierdo.

A los 41’ del primer tiempo, Miguel Godoy había marcado el primero para el Cerro de Franco, que lo merecía. A los 19’ del segundo, otro Godoy, Diego, en lucida acción individual por la izquierda donde mejor se desenvuelve, empató para Luqueño.

De ahí la trascendencia de lo ocurrido en un minuto, entre el 38 del penal atajado y 39. El equipo fronterizo se lanzó al contragolpe; Delvalle, quien había ingresado minutos antes, metió el pase al área donde un goleador como Rogerio no perdona. Este no dudó en rematar con potencia al techo del arco para convertir al cuadro cerrista en visita no grata para los luqueños. Otro contragolpe visitante llevado por Fulvio Duarte terminó en remate de este al travesaño en lo que pudo ser el tercero. De haber convertido el penal, Luqueño pudo haber ganado. Pero falló y el triunfo fue para los visitantes.

Gran alegría en el sector franqueño

Poco público acompañó al Cerro Porteño de Franco al partido en Luque. Eso no privó a los integrantes del plantel de festejar con gran alegría la victoria sobre Luqueño.

Uno de los que más se prodigaron en el equipo esteño fue el volante Fulvio Duarte, quien señaló: “Nos vamos felices porque se hizo un gran esfuerzo en este partido y tuvimos el premio del triunfo. El penal atajado fue clave para buscar el gol de la victoria”.