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Con pocos aficionados en las gradas, el calor agobiante y un primer tiempo pésimo, se vivió ayer la jornada en el Municipal de Carapeguá, entre el Sportivo y Nacional. Un remate pifiado de Jorge Achucarro y otro de Serravalle fueron las únicas situaciones de peligro frente a los pórticos.
Pero en la etapa final se vio un Nacional con mayor dinámica y frontal en el ataque, con la entrada de Torales y Nico Martínez. Precisamente, Nico preparó la jugada por la izquierda para cederlo a Torales, para abrir el marcador con remate cruzado y bajo; y nueve minutos después, nuevamente Nico eludió a dos rivales y cedió el balón a Melgarejo para que marque el segundo para la Academia.
Extrañamente, en ese momento, varios buitres comenzaron a sobrevolar el estadio, como “oliendo” la proximidad de la “muerte” del “Potro”, que llegó a descontar mediante Toranzo, pero antes el arco de Torresagasti sufrió su tercera caída, con el gol de Nico.
Si bien el elenco local mostró mucho amor propio, no había cómo rever la situación, y el cuarto tanto marcado por Orué, en tiempo cumplido, solo sirvió para las estadísticas, y para el “Potro” comenzó la cuenta regresiva, que puede culminar ya el próximo martes si no consigue ganarle a Guaraní.