Jugando un partido bastante discreto pero efectivo, Sol de América se impuso a General Díaz y recuperó la sonrisa, principalmente la de su técnico Daniel Garnero.
El primer tiempo fue salvado con el gol anotado por Tomás Rojas, tras una interesante pared devuelta por Hugo Santacruz, y con sutileza puso el balón sobre el cuerpo de Bernardo Medina, mientras la defensa aviadora quedaba atornillada sin reaccionar.
En General Díaz, Carlos Vera buscaba generar cierto orden, pero todo quedaba en expresiones de deseo, y en los pies de una bien parada defensa azul.
La complementaria tuvo a un equipo aviador que buscó ser agresivo, pero cayó en la excesiva circulación del balón, sin la verticalidad que necesitaba. En tanto que sol, sabía perfectamente lo que tenía que hacer, y era el de cerrar los espacios en el medio y en defensa, para salir de contragolpe y dañar al rival.
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El tiempo corría en contra de los aviadores, que carreteaban dentro de una pista sin rumbo, sin ideas y sin alma. Sol no se apuró nunca, espero su oportunidad, la cual llegó a sobre el final con una galopada de Nelson Romero, que eludió a Aldo Olmedo, quien le cometió penal, el cual Santiago Salcedo cambió por gol para sellar la suerte de General Díaz, y hacer que el Sol vuelva a salir.