Alegan que US$ 273 millones fueron “pulverizados” por subsidio al gasoil

Los US$ 273 millones generados a partir de la deuda de Petropar con PDVSA fueron “pulverizados” a través del subsidio al gasoil entre los años 2008 y 2009, cuando la cotización del crudo trepó a US$ 160 el barril, afirmó ayer el titular del ente, Rómulo Campos, añadiendo que Paraguay planteó a Venezuela una quita del 50%, y el resto pagar al contado.

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–¿A cuánto asciende la deuda de Petropar con PDVSA?

–Esta administración lamentablemente heredó esa deuda, que viene de los años 2008/2009. Tiene una tasa de interés anual del 2%. Empezó con US$ 273 millones y probablemente vamos a terminar con US$ 278 millones, si les sumamos los US$ 5 millones correspondientes al interés.

–¿El interés se está pagando cada año?

–En estos momentos no lo estamos pagando, porque estábamos buscando negociar con PDVSA. Hicimos un esfuerzo tremendo. Viajamos en cuatro ocasiones hasta Caracas (Venezuela). Yo personalmente viajé tres veces, pero lamentablemente hemos venido hablando con interlocutores diferentes. A mi vuelta del último viaje, me reuní con los ministros Santiago Peña, de Hacienda, y Juan Carlos López Moreira (jefe de Gabinete de la Presidencia de la República), a quienes propuse volver a Venezuela con una delegación importante para que nos tomen un poco más en serio, pensaba yo. Volvimos a irnos y no nos dieron pelota otra vez.

–¿Cómo se entiende eso de que “no les dieron pelota”?

–Nos recibió la persona que en ese momento estaba encargada de PDVSA, pero sin ninguna respuesta. Nosotros fuimos con una propuesta, pero no llegamos a nada. Yo les comprendo, tienen enormes problemas con otros países y proveedores que lo nuestro se torna insignificante. Entonces, esta persona se excusó y nos pidió que primero les informáramos por escrito sobre el monto definitivo de la deuda. –¿Y cuál es esa propuesta que le presentaron a PDVSA?

–Lo que pedimos, en síntesis, es una quita del 50% de la deuda y el resto pagarles al contado. Estamos hablando de unos US$ 143 millones, con el aval del Gobierno paraguayo, por eso la presencia del ministro de Hacienda. Pero nos respondió que necesitaba más tiempo para un mejor análisis, y lo único que logramos en esa reunión fue confirmar el actual de la deuda, que es de US$ 273 millones.

–¿La propuesta paraguaya requería de una decisión de alto nivel político?

–Estimo yo que requiere de una decisión política y del Congreso de ellos. Entiendo yo que no es fácil. Se van unos representantes de un país expresando su voluntad de pagar una parte de la deuda, pero con una quita del 50%. Sería lo mismo que a Petropar le deban US$ 100 millones y yo decido recibir US$ 50 millones nomás. Probablemente me voy a ir preso, porque me van a inquirir por qué no cobré la totalidad.

–¿Todo este drama comenzó con el Acuerdo de Caracas, del 2004?

–Es cierto que a través de ese acuerdo se generó esta deuda, pero el Acuerdo de Caracas (firmado por los presidentes Nicanor Duarte Frutos y Hugo Chávez) es un excelente convenio, que básicamente dice que Petropar recibe el producto pagando solamente por el 30%, y el resto lo puede financiar a 15 años y al 2% de interés.

–¿Pero a quién se le puede ocurrir financiar a 15 años un producto de alta rotación?

–La existencia de esta deuda no se debe al plazo. Simplemente se dejó de pagar cuando entre los años 2008 y 2009 el crudo subió a US$ 160 el barril, con lo cual el precio del gasoil tenía que haber llegado a G. 8.000 el litro. Sin embargo, el Estado paraguayo (durante los gobiernos de Nicanor Duarte y Fernando Lugo) decidió no aumentar el precio, y subsidiar “a todo el mundo”.

–La pregunta que sigue latente es: ¿a dónde fue a parar el dinero que Petropar recibió por la venta del gasoil de PDVSA?

–Al subsidio del mercado paraguayo, porque al subir el crudo a US$ 160 el barril, el precio del gasoil debía ser G. 8.000 el litro, pero acá se vendió a G. 5.000. Es decir, lo que Petropar recibía por la venta ha sido pulverizado a través del subsidio al público. Petropar llegó a perder casi G. 2.000 por cada litro comercializado.

–¿Entonces, fue una decisión política?

–Fue una decisión política para evitar, supuestamente, que no suba el pasaje del transporte público, el flete del transporte de cargas y para evitar una inflación galopante, tal como ocurrió en Argentina y en Brasil. Entonces, esos tres años en que el crudo tuvo esos valores, Paraguay vendía un gasoil subsidiado, y ahí es donde Petropar no recaudaba lo suficiente como para pagar el producto que recibía.

jfleitas@abc.com.py

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