Al ser consultado sobre el hecho de que en la matriz energética nacional aún exista un 40% de consumo de biomasas y apenas 18% de energía eléctrica, el Arq. Luis Tavella no dudó en afirmar que el problema es el costo.
“A pesar de que tenemos dos represas enormes, incluso una de las mayores del mundo, y aunque nos digan que seguimos teniendo la energía más barata con respecto a la región, no se utiliza, porque si se hace una relación entre el carbón vegetal y la biomasa en general con la energía eléctrica, esta última es mucho más cara”, explicó.
A esto debe sumarse que con el asunto de la carga reservada hay empresas a las que les subieron hasta en un 150% el costo de la energía y a otras un 100%, cuando nosotros, como país productor, deberíamos tener una energía mucho más barata, obviamente para que se consuma, añadió.
“Nosotros pensamos solo con una visión de exportación de la energía y no con una visión de consumo a nivel local. Son políticas de Estado y hoy la política es la facturación a través de la exportación, por eso es que más del 80% lleva Brasil y Argentina el 90% y nuestro consumo tanto de Itaipú como de Yacyretá sigue siendo muy bajo”, señaló.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Además, el sistema de la ANDE ofrece una baja confiabilidad porque, como mínimo, tenemos uno a dos cortes en el mes y, dependiendo del clima, podemos llegar a tener tres o incluso cuatro por semana. “Eso te da una baja confiabilidad y cada corte produce una pérdida porque automáticamente paran las máquinas, paran las fábricas y, entonces, si tengo que elegir entre una caldera eléctrica y una a leña, aparte del costo, está también la confiabilidad que tengo en el proceso”, finalizó el directivo de la UIP.