El plazo contractual de doce meses para la ejecución de las obras del superviaducto comenzó a correr el 14 de diciembre del año pasado. Sin embargo, la empresa Isolux Corsan, contratista, no hizo un arranque real hasta marzo de este año. Es decir, transcurrieron tres meses del cronograma sin que se pudieran ver trabajos en la zona de Aviadores del Chaco y Madame Lynch.
Cuando por fin estas tareas comenzaron, el ministro Ramón Jiménez Gaona aseguró en una entrevista que ABC Color publicó el 16 de marzo de este año, que la contratista Isolux Corsan trabajaría incluso de noche para cumplir con el cronograma y entregar la obra en diciembre al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), como establece su contrato.
“El superviaducto va a terminar en diciembre. Se va a trabajar en tres turnos, los fines de semana, se va a hacer lo que se tenga que hacer. Es una intervención en una zona urbana, no es un tema de orgullo sino de necesidad. Desde el año 2000 están las condiciones para que se haga y no nos explicamos por qué no se hizo”, dijo en aquella ocasión.
Ayer, en entrevistas a medios radiales, el titular del MOPC dijo que “la obra empezó en marzo y concluirá en marzo del año que viene”. Esto significa que el drama que viven los luqueños para el ingreso y salida de la ciudad, por el cierre parcial de la intersección, se extenderá hasta marzo, cuando el acuerdo era que la obra se entregue en diciembre, totalmente terminada.
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Llamativamente el ministro también dijo que la obra está “avanzada” con relación al cronograma.
En estos cinco meses que transcurrieron desde el arranque real de la obra, en varias ocasiones este diario publicó denuncias acerca del lento desarrollo de los trabajos, y que incluso los mismos se ejecutaban en horario de oficina.
Detalles de la construcción
El contrato de Isolux-Corsan con el Ministerio de Obras Públicas es de G. 125.000 millones, aproximadamente (más de 23 millones de dólares).
La obra consiste en la construcción de un viaducto, un paso a desnivel y una rotonda, que una vez concluidos deben poner fin al embotellamiento de varios kilómetros que se forma en el cruce en horarios de entrada y salida de Asunción.
Atraso de tres meses
El inicio de la construcción del superviaducto se dio con bastante atraso. La orden de inicio de la obra emanada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) se dio en la primera quincena de diciembre del año pasado, pero la obra no comenzó hasta marzo de este año.
Pese al atraso, atribuible exclusivamente a la contratista, lastimosamente ahora el Ministerio de Obras Públicas le beneficia con la extensión del plazo de ejecución de la obra, en detrimento de los ciudadanos.