“Vamos a revisar particularmente este caso. Lo vamos a tomar con mucho celo”, aseguró ayer el ministro Guillermo Sosa, en conversación con nuestro diario. Esta semana, la mencionada cartera recibió una denuncia realizada por una exfuncionaria del Indert, que dice haber sido despedida de manera injustificada por no ceder a los acosos del titular del ente, Justo Cárdenas.
La trabajadora, escribana Karina Benítez, denunció ante dicha cartera de Estado que pese a haber entrado por concurso de oposición y tras dos años de estar en el ente, con buenas referencias laborales, fue despedida de la institución luego de negarse a acceder a pedidos indecorosos de Cárdenas.
Al respecto, Sosa explicó que la denuncia puntual de acoso sexual probablemente deba ser llevada al ámbito penal. No obstante, el despido sí entra en la competencia del ministerio, por lo que se analizará si la desvinculación de la funcionaria fue injustificada.
“Veremos la ficha de la funcionaria y si no existe justificación, se pedirá su reincorporación. Va a ser un caso prioritario para nosotros”, prometió el ministro.
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De acuerdo con los datos, Cárdenas destituyó a Benítez a través de la Res. Nº 264 de febrero último, sin dar mayores explicaciones y limitándose a mencionar que la trabajadora aún se encontraba en su período de prueba, pues hacía dos meses que se la había nombrado en un cargo permanente.
Sin embargo, la exfuncionaria alega que ella estuvo previamente en el cargo como contratada durante siete meses, por lo que si había disconformidad con su trabajo, ya la habían sacado con anticipación.
A su vez, el presidente del Indert niega categóricamente la denuncia de acoso sexual, pero hasta el momento no ha sabido dar una explicación coherente acerca de por qué echó a la trabajadora, que posee buenas referencias laborales.