El aumento de tarifas para las industrias desde marzo último alcanzó el pico más alto en la historia de ANDE. De hecho, el consumo del segmento industrial cayó un 14%, mientras que sus pagos mermaron un 17,9%, según los datos de la estatal.
En efecto, los registros de la ANDE indican que la categoría Industrial pagó en 2015 G. 533.723 millones, mientras el año pasado, en 2016, los pagos disminuyeron a G. 438.209 millones.
El Ing. Juan Encina, secretario de la Asociación de Ingenieros del Sector Eléctrico Paraguayo (AISEP), atribuyó esta fuerte reducción al hecho de que un grupo considerable de consumidores de este andarivel fue excluido, porque sus integrantes no estaban registrados en el Ministerio de Industria. El técnico explica igualmente que el fuerte aumento que se observa en la categoría General se debe a la incorporación de las unidades de consumo excluidas del segmento industrial.
El especialista cuestionó la política implementada desde el gobierno, puesto que utilizando solamente el 18% de la energía eléctrica en el consumo final y cediendo a tarifas regaladas en las binacionales, se beneficia sólo a los países vecinos.
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“Pagar 2.000 millones de dólares por año por hidrocarburos para cocción y transporte y eliminar bosques completos para utilizar la leña en hornos industriales o precarias cocinas rurales parece un buen plan del enemigo”, ironizó Encina.
Por otro lado, el incremento tarifario también tuvo su incidencia, advirtió Encina, puesto que desde el año 1996 al 2016 la tarifa media para las industrias era inferior a la tarifa media nacional de ANDE en 77%, aproximadamente, basada en una política de desarrollo industrial.
Sin embargo, hubo un giro en el Pliego de Tarifas Nº 21, aprobado por Decreto Nº 6.904 del Poder Ejecutivo en fecha 10 de marzo de 2017, con lo cual cambió sustancialmente la política de fomento a las industrias, registrando los mayores incrementos en la categoría Industrial. Esta situación ha impactado fuertemente en las industrias paraguayas.
Por su parte, el empresario Amancio López, propietario de una fábrica de parabrisas, se mostró indignado ante las cifras que muestran que gran parte de las industrias sigue utilizando leña como elemento de combustión, pese a que nuestro país posee una inmensa riqueza en sus dos centrales hidroeléctricas.
“El Paraguay no tiene petróleo, pero posee algo de más valor que es la energía eléctrica; sin embargo, la ANDE aumentó la tarifa y con ello está castigando especialmente a la industria nacional”, indicó. Criticó la falta de una política que incentive el consumo de energía eléctrica tal como lo hacen países más desarrollados. “Estados Unidos incluso está bajando sus impuestos y el precio de la energía para que vuelvan las industrias, pero acá hacemos todo al revés y nos llenamos de productos chinos. No hay protección a la industria nacional”, se quejó López.