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“El análisis patrimonial arroja un incremento patrimonial sustentable, por lo que se concluye que existe correspondencia entre los bienes declarados y los ingresos obtenidos por el señor Justo Pastor Cárdenas Nunes, como presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert)”, concluye el dictamen entregado recientemente por la Contraloría General de la República (CGR) al Ministerio Público y que está firmado por el licenciado Guillermo Vera, jefe del departamento de Profundización, y el abogado Modesto Sosa, director de Dictamen de Correspondencia.
El “análisis” del ente de control, sin embargo, no incluyó datos del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), sobre el que alega que “no se ha tenido respuesta alguna a la fecha de cierre”, acerca de la cantidad de ganado que tiene el funcionario. La CGR se excusa también diciendo que “no se ha tenido respuesta” de la dirección del Registro de Automotores, para obtener la cantidad de rodados, ni de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad), entre otras instituciones.
El contralor Enrique García, en conversación con ABC, negó ayer que se haya tratado de blanquear al presidente renunciante del Indert y argumentó que estos reportes se hacen con los documentos existentes y que, en el caso de recibir los que faltan posteriormente, se cambia la conclusión del informe. Sin embargo, los técnicos Sosa y Vera realizaron la afirmación de que “existe correspondencia”, sin dar lugar a la posibilidad de cambiar su conclusión.
Lo llamativo es que el Ministerio Público sí accedió a todos los documentos y pudo comprobar que Cárdenas ha comprado acciones de empresas creadas en los últimos años y vehículos por sumas que rondan US$ 1 millón.
Adicionalmente, están en la mira de la Unidad de Delitos Económicos y Anticorrupción las propiedades a nombre de sus jóvenes hijos, María Alexandra Cárdenas Pappalardo (22 años), Justo Pastor Cárdenas Pappalardo (24) y Allan Israel Cárdenas Rodríguez (31), sin olvidar que en el paquete de activos se encuentra también una estancia en Pirayú (Paraguarí) a nombre de la Agroindustrial Ganadera JPC, donde Cárdenas es el principal accionista. Esta propiedad tiene 556 hectáreas, con plantación de eucalipto reforestado y casi 900 cabezas de ganado, según datos no oficiales del Senacsa. Todo esto, por un valor que rondaría los US$ 5 millones.
¿Existe correspondencia teniendo un patrimonio cercano a los G. 28.750.000.000 y un salario mensual de G. 32 millones? Increíblemente, según la CGR, sí.
Podría ir a la cárcel
La expectativa de pena, de corroborarse el delito de enriquecimiento ilícito, es de 10 años. Pero, adicionalmente, podrían ser procesados los hijos de Justo Cárdenas y su entorno cercano por aparente lavado de dinero, de acuerdo con los datos.
El presidente renunciante del Indert sigue al frente de la institución pese a este proceso fiscal y los numerosos cuestionamientos sobre manejos poco transparentes detectados en el ente agrario. El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, no ha designado aún reemplazante que asuma el cargo.
gbenitez@abc.com.py