El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) emitió ayer un comunicado en el que el gerente de Reconversión Urbana, Guillermo Alcaraz, aseguraba que la cartera está “en permanente diálogo” con los frentistas del metrobús, que desde esta semana montan guardias nocturnas para evitar que el proyecto avance, sin que se reparen los destrozos ocasionados en el tramo ya intervenido. Tal diálogo, según los afectados, no existe y las obras avanzan a paso lento porque se desarrollan en horario de oficina.
Ariel Villalba, un comerciante de la zona, explicó que hasta ahora Mota Engil, contratista de las obras, no ha concluido completamente ni siquiera 10 metros de obra, en referencia al estado en que se encuentran las veredas, y el compromiso que habían asumido la empresa y el Ministerio, de dejar impecable cada tramo intervenido antes de avanzar al siguiente.
El comerciante entrevistado tuvo que despedir hasta el momento al 30 por ciento de su personal, por el perjuicio económico que le genera el bloqueo de la ruta Mariscal Estigarribia, que con su continuación Eusebio Ayala, constituye el corredor principal del sistema metrobús.
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“Estamos trabajando con la empresa contratista actualmente para facilitar el cruce, tanto de comerciantes y clientes desde la Zona Sur a la Norte y viceversa, ya que eso es indispensable para que el comercio no se vea afectado en demasía”, dice Alcaraz en el comunicado enviado por la cartera. En cuanto a la capacidad de trabajo de la empresa Mota Engil, Alcaraz sostiene que la misma puede llegar a trabajar en simultáneo hasta en seis frentes adicionales.
El problema es que en lugar de trabajar en tres turnos, lo hacen solamente en uno, contrariamente a lo que habían prometido.
Villalba recordó que antes del inicio de los trabajos el propio ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, había prometido que se trabajaría las 24 horas, pero que finalmente solo se trabaja en un turno; de 7:00 de la mañana a 5:00 de la tarde.
“Los fines de semana y feriado acá no se trabaja, y eso que se trata de una avenida principal”, se quejó.
Las guardias que realizan buscan evitar que se instalen otros frentes entre Zavala Cue y Soldado Ovelar.
