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“La delincuencia se traslada en Lamborghini, y nosotros en un Fusca”, dijo ayer el ministro de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Arnaldo Giuzzio, para graficar a los legisladores de la comisión bicameral las condiciones de “orfandad” en que se encuentra la entidad.
Explicó que este año cuenta con un presupuesto de G. 50.433 millones (US$ 8,6 millones al cambio vigente), pero para el ejercicio 2019 el monto se reduce a G. 47.826 millones (US$ 8,1 millones), lo que implica una reducción de G. 2.607 millones.
Giuzzio reconoció que no podía solicitar más de lo que el Ejecutivo había presentado, pero ante la consulta de los parlamentarios de cuánto requiere la entidad, dijo que el monto sea duplicado. En ese contexto, adelantó que pedirían una adenda para que alcance los G. 80.000 millones (US$ 13,6 millones), a fin de contar con equipos, tecnología, chalecos, armas y otros elementos que permitan enfrentar al crimen organizado.
Expresó a los parlamentarios que no se puede seguir como mendigos dependiendo de la colaboración de otras entidades, por lo que considera que es necesario que los recursos sean previstos en el presupuesto.
El titular de la Senad dijo que a pesar de las limitaciones que tienen para operar y enfrentar a narcotraficantes, el perjuicio que se les generó a delincuentes fue del orden de US$ 130 millones.
Defensa
Por su parte, el ministro de Defensa Nacional, Bernardino Soto Estigarribia, señaló que el proyecto de presupuesto para el próximo año asciende a poco más de G. 1,7 billones (US$ 303,6 millones), pero que es insuficiente ante las innumerables necesidades que tiene la institución militar.
Soto Estigarribia también dijo que no iba a pedir un ampliación porque el Ejecutivo remitió un monto que es lo que está en condiciones de cumplir, pero que quería exponer a los legisladores para que tomen conciencia respecto a las necesidades.
Sostuvo que cada año se reduce el presupuesto militar y que con este se mantiene al mínimo la capacidad operativa, por lo que no se puede controlar suficientemente el espacio fluvial, tampoco la línea de frontera y mucho menos el espacio aéreo.
Ante la insistencia de los parlamentarios sobre el monto que requeriría la institución, el ministro habló de unos US$ 250 millones en un plazo de cinco años, a fin de fortalecer las unidades.