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Los denunciantes son Carlos David Caballero B., Alejo Núñez y Waldemar Zárate Schulz, según nota suscrita y remitida al presidente Mario Abdo Benítez el pasado 11 de abril.
Uno de los inmuebles que mencionan en la nota los denunciantes está ubicado en el distrito de Itakyry, departamento Alto Paraná, y tiene una dimensión de
2.989 hectáreas, identificado como finca N° 31.510, padrón N° 29.885 y matrícula K06/3463, inscripto en los Registros Públicos en fecha 10 de octubre de 2014, propiedad del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert).
El segundo caso es un inmueble ubicado en el distrito de Capitán Bado, departamento de Amambay, a 20 kilómetros de la frontera con el Brasil, identificado con el padrón N° 13 y finca N° 14, colonia de hecho denominada “Cadetes de Boquerón”, con una superficie de 9.707 hectáreas.
La nota de los denunciantes en este caso aclara que esas tierras se encuentran totalmente fraccionadas o loteadas para su distribución a compatriotas sujetos de la reforma agraria, pero que la realidad es otra, “están totalmente usurpadas por brasileños, grandes ganaderos que viven en el lado brasileño, pero usurpan nuestras tierras sin derecho alguno, beneficiándose económicamente de nuestras tierras en complicidad con los funcionarios del Indert”.
El tercer caso se refiere a tierras ubicadas en el distrito de Buena Vista, departamento de Caaguazú, colonia de hecho denominada “Yerovia”, identificada cono finca N° 1.436, padrón N° 2.521, con una superficie de 2.307 hectáreas, así como las tierras identificadas con padrón N° 3.091, con una superficie de 1.601 hectáreas, y donde la mayor parte “está siendo usurpada y explotada de manera indiscriminada en detrimento de la población y el medio ambiente”.
Indert: botín de autoridades
Los denunciantes mencionan que los casos mencionados son pruebas de que cada autoridad de turno del Indert “toma como un botín a la institución, para enriquecerse en forma ilícita, dejando huérfanas a miles de familias campesinas que tienen la ilusión de poder acceder a un sueño, que es un pedazo de tierra”.
Agregan que el Estado paraguayo no necesita comprar tierras para distribuir al campesinado, “basta con repartir las tierras que el Estado ya tiene y que los funcionarios del Indert ocultan para sus negocios y así enriquecerse ilícitamente a costa del Estado paraguayo”.
Intervención
Los denunciantes solicitan en la nota que el Presidente de la República disponga la intervención del Indert y que, de esa manera, podrá comprobar “que hay una gavilla de delincuentes con fachada de sindicatos, quienes se ufanan de ser indispensables e inamovibles por ser cupos de ‘altos políticos’ y consecuentemente, destituya a este presidente del Indert por ser un inepto, corrupto y antipatriota”.
Menoscabo a tareas del ente
El presidente del Indert, Horacio Manuel Torres, fue consultado respecto a la denuncia ante el Presidente Abdo Benítez. Señaló que los denunciantes son personas que quieren menoscabar la tarea que hace la actual administración del Indert, pero que seguirán trabajando como lo vienen haciendo y que con esas tareas están “pisando el callo” a gente que “ya no está pudiendo hacer negocios que solían hacer anteriormente con algunos funcionarios también infieles”. Indicó que en algunos de esos asentamientos citados se quejan porque los denunciantes les cobran “en especies” por sus gestiones.