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La cartera fiscal paga a la ANDE, Copaco y Essap por el consumo mensual de los organismos públicos y una parte correspondiente a la deuda acumulada, denominada histórica, que se arrastra hace más de 10 años.
Hacienda detalla que en diciembre del año pasado la ANDE cobró G. 2.676 millones (US$ 443.106), Copaco G. 1.880 millones (US$ 311.331) y la Essap G. 616,2 millones (US$ 102.025).
En noviembre había pagado un total de G. 15.782 millones (US$ 2,6 millones), mientras que en octubre la transferencia fue de G. 27.321 millones (US$ 4,5 millones).
El informe de la cartera señala que en 2017 la deuda histórica había cerrado con un monto de G. 297.517 millones (US$ 49,2 millones), pero tras los pagos efectuados hasta octubre de 2018 se redujo a G. 284.936 millones (US$ 47,1 millones al cambio vigente).
Los técnicos estiman que luego de la transferencia realizada en noviembre y diciembre último el saldo de los compromisos pendientes se redujeron aún más, aunque estos datos aún no se tienen disponibles.
El 75% de esta deuda que tienen las instituciones públicas es con la ANDE, 17% corresponde a Copaco y 8% con la Essap, dice el informe. No se menciona cuales son las entidades que más adeudan, pero extraoficialmente se sabe que son el Ministerio de Educación, el Ministerio de Salud Pública, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
A pesar de la enorme deuda que se tiene con la ANDE, esta entidad deberá aportar al Tesoro este año unos G. 120.000 millones (US$ 20 millones) para cubrir los gastos establecidos en la ley de presupuesto. Hacienda también ayer emitió un informe en el que se señala que se busca implementar buenas prácticas en las empresas públicas con el objetivo mejorar los servicios para la ciudadanía.
En ese contexto, destaca que con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y Governance Consulting se viene trabajando con la Dirección General de Empresa Públicas para la implementación de estas prácticas en los próximos meses, adoptando medidas con base en estándares internacionales, lo que constituiría el primer paso para lograr la modernización.
A criterio de los técnicos, las empresas públicas son un activo muy importante del país, por lo que deben ser eficientes y transparentes.