Balotta refirió que un altísimo volumen de gas licuado de petróleo (GLP) de uso doméstico ingresa en forma ilegal al país desde Brasil, inunda Ciudad del Este y de ahí se expande hasta Coronel Oviedo, y otros puntos del país. Esta situación afecta en un 50% del movimiento normal del sector, lo que se traduce también en que están operando al 50% de la capacidad instalada, lo que acarrea un perjuicio a nivel nacional.
Actualmente, Argentina, que se constituyó en los últimos años en la principal “exportadora” de garrafas de contrabando, dejó de enviar al país estos productos, en primer lugar por el fuerte aumento registrado en este combustible meses atrás, lo que paró totalmente el flujo ilegal desde el lado argentino. A esto se suman las medidas implementadas por el nuevo gobierno, con la liberación del mercado cambiario o eliminación del “cepo cambiario”.
Precio del gas brasileño
La garrafa de gas, que ingresa de contrabando a nuestro país desde Brasil, cuesta apenas unos 35 reales en Foz de Yguazú, lo que al cambio actual apenas representan unos G. 53.000, y encima, se trata de una garrafa de 13 kilos, que es la utilizada en el vecino país.
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En tanto, en el lado paraguayo, la garrafa de 10 kilos cuesta aproximadamente, en promedio, unos G. 75.000, aún con la reciente rebaja de G. 200 por kilo, mientras que el cilindro de 13 kilos, que es el que ingresa desde Brasil, tiene un precio final estimado de G. 88.000 para el producto local.
La abismal diferencia de precio se sustenta fundamentalmente en dos motivos, la depreciación del real y la baja cotización al público del hidrocarburo.
Mercado interno
El mercado del gas doméstico paraguayo representa, aproximadamente, unos 8 millones de kilos mensuales, en temporada de alta demanda, es decir, durante la temporada invernal. Sin embargo, en épocas calurosas como las que estamos viviendo, el consumo se desploma y las importaciones en consecuencia también caen, a aproximadamente unos 6 millones de kilos mensuales. Incluso, según fuentes del sector privado del gas, en diciembre último se observó otro bajón en las ventas, ya que volvió a descender la comercialización en apenas 5 millones de kilos, en el último mes del año pasado. Refieren que en esta caída tiene mucho que ver el contrabando, además de la recesión general que afecta a nuestro economía en los diferentes rubros.