El problema del río no es solo vial, también es fluvial

La tarea de limpieza del Pilcomayo no es problema que competa exclusivamente a empresas viales. Rehabilitar la embocadura es un tema estrictamente fluvial. El uso de draga fue fundamental para recuperar las aguas del río.

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El Estado tiene previsto invertir este año 25 millones de dólares en la rehabilitación de la embocadura y el canal paraguayo del río.

Una torta extremadamente grande, sin duda alguna.

Aunque las comparaciones siempre son odiosas vale la pena mencionar que Argentina invierte 1 millón de dólares anuales en el mantenimiento de su canal.

Se podrá argumentar que nuestros vecinos realizan mantenimiento más que nada, pero esta es una media verdad: las inversiones millonarias realizadas en nuestro territorio hasta hoy no condujeron a la recuperación plena del río.

Basta con mencionar que la embocadura de nuestro canal se encuentra en territorio argentino.

El Ministerio de Obras Públicas y la Comisión Nacional del Pilcomayo manejan el tema Pilcomayo como un tema vial.

Prueba de ello es que las empresas viales toman el control de las obras y nunca se estableció el componente fluvial en la rehabilitación de la embocadura.

En el proceso de licitación que actualmente se lleva adelante, para la limpieza de los canales del río, las empresas viales pidieron que se excluya la contratación de dragas en el trabajo.

La Dirección Nacional de Contrataciones Públicas recibió protestas de empresas viales exigiendo que las dragas no participen de los trabajos.

Teniendo una “piolita en la mano” piden a la Dirección de Contrataciones que se baje la potencia de succión de los motores.

Éxito de las dragas

El funcionamiento de las dragas permite, en este momento, que las aguas del Pilcomayo sigan regando nuestro territorio.

El trabajo de estos equipos es fundamental para mantener abierta la embocadura de nuestro canal, con el valor agregado de que pueden arrojar a mayor distancia los sedimentos para que no vuelvan a caer dentro del conducto.

Las dragas que están operando en el Pilcomayo operan con motores de 1.100 HP y están diseñadas para operar con niveles variables extremos como es el caso del caudal del río.

Las dragas se construyeron en nuestro país y fueron diseñadas específicamente para operar en el Pilcomayo.

Las empresas viales piden a la Dirección de Contrataciones que la potencia del motor baje a 400 HP.

Llevar dragas de 400 HP no tendrá ningún valor en el Pilcomayo, salvo aumentar ganancias.

El Ministerio de Obras Públicas pidió a las empresas viales que retiren las protestas entregadas a la Dirección de Contrataciones; se supone que esto incluye el tema de las dragas.

Tema licitación

Las grandes empresas viales controlan las licitaciones en el Pilcomayo y el MOPC establece exigencias que responden a grupos “vialeros”.

El actual ministro de Obras Públicas, Arnoldo Wiens, ya recibió el paquete que ahora se busca licitar por valor de 25 millones de dólares.

Requisitos desmedidos impiden que empresas viales menonitas puedan participar directamente de las licitaciones, la única alternativa que tienen para trabajar es buscar un subcontrato.

Y ahora buscan excluir también a las dragas a pesar del éxito en su trabajo.

La limpieza de la embocadura de nuestro canal requiere dragas y equipos anfibio. Las excavadoras anfibias Kori son insuficientes para la magnitud de sedimentos que transporta el río.

A los trabajos de limpieza del canal se tiene que sumar maquinaria vial porque es una tarea que no pueden realizar equipos anfibios.

Esta complementación de técnicas es imprescindible. Las empresas viales sólo miran sus bolsillos.

roque@abc.com.py

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