Sin ruido ni gases contaminantes y con menos costo de mantenimiento. Así serán algunos de los colectivos que cuatro líneas porteñas sumarán a sus flotas: funcionarán con electricidad y se pondrán a prueba durante un año. Si el test es exitoso, esta tecnología podría aplicarse a mayor escala por las calles de Buenos Aires y el Conurbano, informó la semana pasada el diario Clarín de Argentina. Las ocho unidades ecológicas comenzarán a circular en noviembre y harán el recorrido habitual de su respectiva línea.
Los colectivos contarán con proveedores distintos: tres son los fabricantes chinos de buses eléctricos que darán las unidades en comodato, las cuales deberán ser ingresadas al país antes de julio. Cada vehículo costará unos US$ 350.000 si es de carga rápida (la cual permite recorrer unos 70 kilómetros), y unos US$ 500.000 si es de carga lenta, ya que resulta más eficiente energéticamente (alcanza hasta 220 kilómetros con una sola recarga).
El objetivo de esta prueba es evaluar la viabilidad técnica, económica y ambiental de esta modalidad, que resulta novedosa en todo el mundo, menos en Paraguay. Aquí el Gobierno se niega a implementar este tipo de tecnología, mientras en distintas partes del mundo buscan limitar el uso de gasoil.
En Alemania, por ejemplo, el Tribunal de lo Contencioso-Administrativo alemán determinó que las ciudades de ese país pueden prohibir la circulación de los coches diésel, en una medida que busca reducir la contaminación.
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MOPC desechó energía abundante y limpia
En el año 2011 el consorcio Logit realizó, por encargo del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), un estudio de factibilidad, a cuya copia tuvimos acceso, que luego fue adaptado para la Mesa Energética por el ingeniero Óscar Andersen.
Ese documento modificaba algunas variables comparando el precio del gasoil, en aquel entonces, frente al precio de la electricidad. La conclusión del estudio de Andersen fue que optar por buses eléctricos o trolebuses representaba al sistema un ahorro de 11 millones de dólares.
En lugar de eso, el MOPC optó por buses a gasoil.
