Aparte de los eventuales perjuicios económicos y sociales para las empresas que están en la avenida Eusebio Ayala, la ejecutiva de Biotécnica recordó que entre los años 70 y 80 se realizó una expropiación de tres metros y más de las propiedades asentadas en la citada avenida y la ruta Mcal. Estigarribia. “Sin embargo, dado que nunca se efectuó pago en concepto de indemnización, tampoco se realizaron las transferencias a favor de la Municipalidad, por lo que estas franjas siguen dentro de los títulos de propiedad de los frentistas, que continúan abonando impuesto inmobiliario por ellas, en un 98% de los casos”, enfatizó.
Sobre el mismo tema, añadió que estos espacios siguen siendo propiedad privada, “por lo tanto es mentira que los frentistas están usurpando como estacionamiento para sus clientes un bien municipal, sino que destinan a sus clientes parte de su propiedad, cuya expropiación no se concretó”.
Al respecto, el asesor jurídico de los frentistas, Abog. Víctor Peña Gamba, aseveró que el metrobús comienza con el atropello a la propiedad de los frentistas, donde el MOPC eliminó y desvirtuó todo el procedimiento expropiatorio, violando la Constitución y las leyes. “El Ministerio está dando a la población paraguaya claras señales de barbarie, autoritarismo y prepotencia”, aseveró.
Añadió que la incapacidad de dialogar, consensuar, negociar y utilizar herramientas democráticas llevan a las autoridades del Gobierno a violar la Constitución y las leyes, como sistema para “imponer desesperadamente por la fuerza sus proyectos quiméricos” no deseados ni solicitados por el común de la gente, incumpliendo así con los requisitos o exigencias de un Estado Social de Derecho.
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El profesional agregó que la confiscación de bienes privados se halla prohibida por el Art. 20 de nuestra Carta Magna. “Las garantías constitucionales frente a la expropiación establecen claramente que esta debe estar determinada en cada caso por la ley, y el pago de una justa indemnización debe ser previa”, insistió.
Atropellos
Acotó que los mecanismos previos a toda obra pública referentes a la expropiación no se realiza mediante reuniones informativas o audiencias públicas, en donde se explica el alcance de las obras que se pretende llevar a cabo, sino cumpliendo con las normas legales y constitucionales, que son previos, y no como se vienen ejecutando hasta el día de la fecha. “Este reclamo histórico de la gente de uno de los emporios comerciales más importantes de la república del Paraguay nunca fue satisfecho por ningún gobierno, tanto que siguen siendo avasallados y atropellados en su más elemental derecho a la propiedad”, enfatizó Peña Gamba.
Afirmó que sucesivas autoridades públicas, sean municipales o del poder central, “han venido despojando” a los frentistas de los beneficios de su propiedad (garantizada en el Art. 21 de la Constitución) desde hace décadas, con el “más deleznable de los procedimientos”, que constituye la mera apropiación y despojo de lo ajeno, sin pagar nada, para utilizarlo como propio, maquillada con la retórica de “servir al bien público o al interés general”, típico método utilizado por algunas dictaduras populistas.
Deuda incalculable
El letrado advirtió igualmente que hasta el día de hoy el Estado mantiene una “deuda incalculable” con personas físicas y jurídicas con propiedades sobre Eusebio Ayala, a quienes sencillamente se les ha negado una garantía esencial, constitucionalmente prevista, que conlleva al pago de lo justo a través del procedimiento legal de expropiación.
Remarcó que el Estado simplemente se ha limitado a “arrebatar por la fuerza” los bienes ajenos, mediante el simple expediente de paralizar los procedimientos legales establecidos.
DUDOSAS PROMESAS
De acuerdo al contrato firmado entre el MOPC y la firma portuguesa Mota-Engil, que será la ejecutora de las obras civiles del metrobús, tiene la obligación de indemnizar a la secretaría de Estado por las “interferencias innecesarias” que ocasione en la zona y que estén “más allá de lo razonable”. Cabe recordar que en junio próximo deben comenzar las obras civiles del criticado proyecto, a lo largo de Eusebio Ayala y su continuación, la ruta Mcal. Estigarribia. Además, ministro Ramón Jiménez Gaona aseguró días pasados, en respuesta a la preocupación de los frentistas, que los trabajos en cada zona no durarán más de cuatro meses. Esta “promesa” ha sido duramente criticada y calificada de “fantasiosa” por frentistas de Fndo. de la Mora.