Encina es presidente del capítulo Paraguay de la IEEE (Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos) (secretario de la Aisep (Asociación de Ingenieros del Sector Eléctrico Paraguayo y expresidente de la UIA (Unión de Ingenieros de la ANDE).
Una visión más abarcante, en la generalidad de los casos, impide que el árbol tape el bosque. En efecto, en el presente año leíamos en las páginas de las oficinas paraguayas de la entidad binacional que, en los primeros diez meses del corriente año, la participación de la energía de Itaipú en el Sistema interconectado Nacional (SIN) “aumentó de 76% a 90%” y que la cantidad que retira la empresa eléctrica estatal paraguaya entre el 2016 y el 2017 saltó del 4,93% al 19%.
Art. XIII del Tratado
Ante esta parcializada observación de la realidad, especialmente de la que concierne al aprovechamiento paraguayo de la energía de Itaipú, de cuya producción le pertenece exactamente la mitad (Art. XIII del Tratado de Itaipú) , conviene reiterar que en el lapso de referencia (2009/2016) en promedio, la ANDE retiró 8,9% y el 91% Eletrobrás.
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En los siete años, el pico más elevado del diagrama de suministro de la entidad binacional al sistema de la ANDE coincide con el 2014, año que le correspondió el 12,21%, el 2015 bajó al 12,01% y al 10,97% el año pasado.
Menos por más
El Ing. Encina, sobre estos últimos puntos, dice que “resulta llamativo que en 2015 la ANDE haya retirado menos energía de Itaipú; sin embargo contrató más potencia y se dispararon sus gastos de explotación”.
Para sustentar esta observación, el técnico compatriota informa que en 2015 la estatal paraguaya pagó a Itaipú US$ 344.100.000, o sea 20,13% más que en el ejercicio precedente.
Encina recuerda que Itaipú “vende potencia” y que en el lapso en cuestión, incluso hoy, la tarifa kW/mes se mantuvo estable en US$ 22,6.
“El hecho que en un mismo periodo se hayan incrementado los gastos de generación desde Itaipú en un porcentaje mayor que el crecimiento de la energía retirada, no resulta lógico. Menos aún lo fue en el 2015, cuando la energía retirada por ANDE de Itaipú fue menor que en 2014 (vea los cuadros), pero terminó pagando un monto mayor por menos energía retirada”, advierte igualmente Encina.
El técnico infiere que hubo “una mala contratación” de la ANDE, hecho que se reflejó en sus números negativos de 2015 y 2016.
Agrega que “del 2008 al 2016, la ANDE pagó por la energía equivalente adquirida siempre con valores crecientes y con un incremento anual promedio del 8,47%. Siendo el año más crítico el 2014, en el que el monto abonado por ANDE a la Itaipú se incrementó con respecto al 2013 en 20,13%”, todo esto, insistimos, a pesar de que la tarifa de potencia se mantuvo estable en US$ 22,6/kWmes.
La tasa real es del 6% anual
El crecimiento del consumo nacional de energía eléctrica fue del 6% anual, aproximadamente, en los últimos 10 años y, en ese periodo, la participación de Itaipú en la provisión de la energía utilizada por la Administración Nacional de Electricidad fue de 76%, por consiguiente, ciertos “pronósticos” relacionados con el comportamiento futuro del sector eléctrico nacional fueron recargados de optimismo o simplemente buscan justificar la factibilidad de ciertas obras, como la nueva central sobre el brazo Aña Cua del Paraná en Yacyretá.