En el caso de Santa Rosa del Aguaray, San Pedro, se verificó una parcela de soja que linda con una comunidad indígena en la Colonia Santa Bárbara, por lo cual, técnicos de la regional del Senave hicieron un procedimiento de adecuación.
En el lugar se constató que parte de la parcela de producción no contaba con la franja de protección de 50 metros libres de cultivo establecida por la ley, contiguo a cinco viviendas de la comunidad indígena y a lo largo de 450 metros.
Los cultivos son de Agrosilo Santa Catalina SA, del Grupo Favero. Según informes del Senave, esta empresa cooperó con maquinarias y operarios para adecuar el cultivo a lo que dispone la legislación.