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Si la emisión de los bonos soberanos se concreta sin el aval del Legislativo, la operación podría ser comparable incluso al conflicto que tiene el país en la justicia internacional por la deuda de Gramont Berres, advirtió el abogado Stimson.
La emisión de bonos no fue aprobada por el Estado paraguayo aún, y si bien habría mayoría en el Congreso para la aprobación del proyecto del senador Carlos Amarilla (PLRA), recién sería tratado en comisión este martes 21, y posteriormente en el pleno. No obstante, el Gobierno ya puso en marcha su plan para colocar unos US$ 500 millones.
Según Stimson, las negociaciones apresuradas de los títulos deja una mala señal al mercado internacional por la forma desprolija de la gestión.
“Si el proyecto legislativo se aprueba después de la emisión puede subsanar la situación, y el Gobierno paraguayo no se vería en la necesidad de repudiar la deuda, como lo hizo en el caso Gramont Berres. Es subsanable, pero no es lo ideal, queda en evidencia la falta de seriedad”, acotó.
La delegación oficial está compuesta por dos equipos; uno de ellos liderado por el ministro de Hacienda, Santiago Peña, quien cubrirá las reuniones con inversionistas en EE.UU. (Nueva York), y el otro equipo será liderado por el presidente del Banco Central, Carlos Fernández Valdovinos, quien estará a cargo de las reuniones en Europa (Londres).
La intención del Gobierno es medir la temperatura del mercado financiero y el interés de los inversionistas, y luego, al término de estas reuniones, ya podría darse la emisión de bonos.
Peña argumentó sobre esto que lastimosamente ya no pueden esperar el proceso legislativo para proceder, ya que hay varios compromisos del Estado que no pueden pasarse por alto.
Tratarán proyecto
Por otra parte, la Comisión de Hacienda del Senado dictaminará este martes a la mañana sobre el proyecto que pretende legalizar la emisión de bonos y no se descarta una sesión extra de la Cámara Alta para tratar el tema ese mismo día, a fin de que pueda finiquitarse en diputados el miércoles o jueves. En teoría, el Ejecutivo ya cuenta con mayoría de votos para apoyar el proyecto de Amarilla, que legalizará la emisión general de títulos por unos US$ 558 millones.
De la emisión pretendida para el presente año, la mayor parte, en este caso el 55%, será para amortizar deudas (US$ 305 millones) y solo 45% para inversiones (US$ 253 millones).