A través de la nota N° 1.429, fechada el 29 de marzo último, la Contraloría General pidió rendición de cuentas sobre el MAG al jefe del Gabinete Civil de la Presidencia de la República, Juan Carlos López Moreira.
La misiva hace referencia a un préstamo de 18.800.000 euros más una donación de 3.650.000 de la misma moneda (equivalentes a unos US$ 21,3 millones en total, al cambio de ayer), que dicha cartera está gestionando para la ejecución del Proyecto de Mejoramiento de la Agricultura Familiar Campesina e Indígena en los departamentos de Región Oriental del Paraguay (Promafi).
“Si bien el proyecto en cuestión puede ser conveniente para esas comunidades, se debe tener en consideración la existencia de varios otros proyectos con casi idénticas metas, ya ejecutados y en ejecución por el mismo órgano, el MAG”, resalta la nota.
Posteriormente, enumera los emprendimientos específicos con sus respectivos créditos: El Préstamo N° 7503-PA para el Proyecto de Desarrollo Rural Sostenible (Proders) por la suma de US$ 37,5 millones, con financiamiento del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), que tras ser auditado por la Contraloría “evidenció la modestia de los resultados, debido a la escasa capacidad de gestión del MAG”. Luego, menciona el Programa de Apoyo a Inversiones Sociales de Infraestructura (Paisi), aprobado por Ley 4.000/10 de un monto de US$ 85 millones de la Corporación Andina de Fomento (CAF).
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Finalmente, se resalta el convenio de préstamo N° 8.316-Py-Proders, por la suma de US$ 100 millones con el BIRF en calidad de financiamiento adicional al préstamo del mismo organismo, mencionado anteriormente. “En consecuencia, se solicita justificar documentalmente la necesidad de contraer un nuevo crédito”, finaliza la misiva firmada por el contralor interino, Roy Rodgers.
En conversación con nuestro diario, el ministro del MAG, Juan Carlos Baruja, explicó ayer que la gestión del nuevo préstamo tiene como objetivo que los programas ejecutados actualmente, que en dos o tres años llegarían a su término, puedan tener continuidad. “Los pedidos de crédito tardan años en concretarse; es un proceso largo. Estos fondos que estamos pidiendo no serán para este Gobierno, sino para poder enlazar y dar continuidad a los proyectos”, puntualizó.