Masivo ingreso de contrabando a través de Tres Fronteras

El tráfico ilegal de mercaderías en el puerto Tres Fronteras de Presidente Franco es incesante. Los contrabandistas pasan libremente mercaderías de todo tipo a través del río Paraná.

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Los mismos operan con mucha facilidad ante la vista de los propios delegados aduaneros de la zona. Los productos frutihortícolas son los rubros más elegidos por los “paseros”.

Los contrabandistas operan sin ningún obstáculo en esta triple frontera, trayendo todo tipo de mercaderías desde la Argentina. El paso de los productos por barcaza se realiza generalmente desde las 6:00, de lunes a sábado.

El sistema de trabajo es sencillo y se desarrolla a la vista de todos quienes frecuentan la frontera. Ayer a la mañana unos 15 furgones llegaron al lado paraguayo y fueron recibidos por los funcionarios aduaneros. Una vez que cruzan al lado paraguayo en menos de 15 minutos los rodados abandonan nuevamente el lugar con sus respectivos cargamentos. De acuerdo a lo que se pudo observar frente al puesto de control de Aduana, automóviles de pequeño y gran porte pueden pasar libremente por esta zona.

Los furgones ni siquiera son verificados por los funcionarios de la aduana, quienes incluso se encargan de guiar a los conductores para evitar un desorden. Algunos rodados permanecen estacionados por unos minutos frente a la oficina de control, y sus ocupantes realizaron algunas gestiones para pasar posteriormente, según se pudo observar.

El mercado de abasto de Ciudad del Este es el principal espacio receptor de las mercaderías que ingresan ilegalmente al país. Frutas, verduras y bebidas alcohólicas generalmente son adquiridos en grandes volúmenes por los comerciantes para su posterior venta.

Periodistas de este diario siguieron los pasos de un furgón con chapa CCC 092, que al cruzar la frontera hacia Paraguay se trasladó hasta el mercado para distribuir sus mercaderías.

Igualmente, se observó a un camión repleto de tomates, distribuidos en distintas cajas que tenían el sello de su país de origen, en este caso de Posadas, Misiones (Argentina).

Una vez estacionados, los comerciantes se acercan a los rodados y trasladan las mercaderías en carretillas y camionetas.

Teodoro Galeano, miembro de la Central de Horticultores del Alto Paraná, señaló que la producción nacional mejoró en calidad y cantidad por lo que considera que están en condiciones de satisfacer la demanda de los consumidores. Afirmó que los últimos meses el ingreso de contrabando de frutas y verduras se logró reducir, pero no lo suficiente para devolver el valor que corresponde a la producción nacional.

A su vez, el jefe de resguardo del puesto aduanero Tres Fronteras, Hugo Cabrera, señaló que no existe un “contrabando riguroso” ya que generalmente los que realizan esta actividad son personas humildes que cumplen con ciertas normas, por lo que operan durante el día. Comentó que la institución cuenta con un despacho menor para el ingreso de productos frutihortícolas.

Cabrera reconoció además que, a pesar de los controles, el ingreso de mercaderías “tiene mucho pique”, por lo que un control absoluto resulta difícil, además de que la actividad se ha “vuelto el pan de cada día de los pobladores del Alto Paraná”, acotó.

El aduanero garantizó que la institución ejecuta una serie de controles antes de permitir el ingreso de las mercaderías. Recalcó que la Aduana se encuentra realizando varias gestiones con el gobierno argentino para regularizar la importación y exportación de mercaderías.

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