Luego de que el presidente del emblema mayorista B&R, Luis Ortega, criticara a través de nuestro diario el reciente decreto por el cual, una vez más se le favorece a Petropar, en detrimento de todos los demás, el MIC dio a conocer millonarias multas aplicadas a gasolineras que portan este emblema. El cuestionado decreto (N° 5714, del 8 de agosto) obliga a todos los sellos distribuidores a instalar una máquina expendedora en todas las gasolineras del país para vender la nafta de Petropar.
Se trata de una imposición del Gobierno para distribuir la nafta común de la estatal. A esto se suma que el ente ya fue beneficiado con un anterior decreto, por el cual se le dio la exclusividad para importar y vender el 50% del total del volumen consumido en el país en gasoil y nafta comunes, y nafta virgen. Dicho de otro modo, se trata de un monopolio parcial, que raya los mandatos constitucionales del país, porque Petropar tendría que competir en igualdad de condiciones con las demás empresas privadas, ya que se constituye en un emblema más del mercado.
Fuentes del sector que solicitaron el anonimato ante la sutil amenaza del MIC, que cada vez que se cuestiona el accionar del gobierno aplica multa y persigue a los que cuestionan, refirieron que ya “es una constante este cháke (amenaza) permanente”.
La misma situación vivieron el año pasado, cuando fue público el enfrentamiento por decretos promulgados para favorecer a Petropar. Incluso, uno de los emblemas, Petrobras, recurrió a la Justicia y el mismo presidente Cartes había enviado una nota al juez de la causa, en una cuestionable acción de injerencia de un poder sobre otro.
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Otro de los motivos del nuevo decreto sería para colocar el alcohol de Petropar, el más caro del mercado, generado por su obsoleta y prebendaria alcoholera de Troche, atendiendo a que la nafta común que pretende imponer en todo el país lleva un alto porcentaje de etanol.
Es sabido que dicha planta no se maneja por parámetros económicos, sino político- partidarios, en donde diputados y senadores colorados colocan a sus amigos seccionaleros, tal como se dio recientemente, con 130 operarios políticos que ingresaron a la alcoholera.