Ocultan contrato que entregará el aeropuerto a un privado por 30 años

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El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) asegura que el contrato por el cual se entregará a un inversor privado el aeropuerto Silvio Pettirossi, por los próximos 30 años, aún no está listo y que todo lo que existe es una proforma. Todo el proceso está inmerso en un mar de dudas respecto al futuro financiero de la principal terminal aérea del país.

Claudia Centurión, titular de la Dirección de Proyectos Estratégicos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), afirma que el contrato por el cual se entregará el aeropuerto bajo el régimen de alianza público-privada (APP) aún no está listo. La funcionaria dice que todo lo que existe es la proforma que está en las bases administrativas de la licitación, y que se pueden ver en el portal de Contrataciones Públicas.

Sin embargo, resulta difícil creer que las instituciones que intervienen en este proceso APP no tengan listo el contrato por el cual se entregará el aeropuerto por los próximos 30 años. Se sospecha que lo que sucede realmente es que le están ocultando su contenido a la ciudadanía.

Un canon que no es razonable

Esta licitación aún no tiene un ganador, pero como el principal criterio económico-financiero de adjudicación es el ofrecimiento de un mayor canon al Estado, todo indica que Sacyr-Agunsa será adjudicado. El canon que ofreció es del 32,06% de los ingresos brutos mensuales que perciba la terminal aérea. Su competidor Vinci ofreció solo el 1,02%.

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Hay muchos aspectos que hacen dudar de la conveniencia del negocio de entregar una terminal, que hoy es rentable y mantiene a otros 10 aeropuertos. El principal cuestionamiento es justamente el canon, pues según especialistas, es imposible que con solo el 32,06% de los ingresos brutos que va a recibir el Estado, pueda seguir manteniendo esos 10 aeropuertos.

Aunque el Estado conserva en la APP la facultad de fijar las tarifas que pagará el usuario de la terminal aérea, resulta difícil creer que se lograrán los objetivos sin aumentarlas.

En ese sentido, se debe recordar que la tasa que hoy se cobra en nuestro aeropuerto, de 41,5 dólares, está entre las más altas de la región. En Uruguay está en 29 dólares y en Brasil la más alta es de 36 dólares. Si la tasa sube desmesuradamente se corre el riesgo de que se pierda conectividad.

Otra cuestión es que las inversiones se harán en etapas y la única inversión obligada es la primera y principal (de 110 millones de dólares aproximadamente).