Paraguay no tiene ni idea de cómo utilizar las aguas del río Pilcomayo

Nuestro país se limita a contratar empresas viales para limpiar el canal en el Pilcomayo. El Paraguay no tiene ni idea de cómo utilizar las aguas del río. La comisión del Pilcomayo no cumple el fin para el cual fue creada.

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/S27PVR3LO5DUBBU5KFK3EEXD3I.jpg

Cargando...

El Estado paraguayo, al igual que en otros temas de interés nacional, no tiene ni idea de qué hacer con el río Pilcomayo.

La mediocridad e improvisación de nuestra clase política se refleja en el abandono al Pilcomayo.

Dada la realidad de nuestros dirigentes no queda otra sino decir una perogrullada: sin agua no hay vida.

Casi la mitad del Chaco paraguayo depende de las aguas del Pilcomayo; si el río no ingresa los efectos negativos se sienten en un territorio donde un millón de cabezas de ganado dan sostén a la economía.

Ante una dependencia absoluta del agua ¿cómo es posible descuidar un bien que no tiene reemplazante?

La falta de respuesta a esta pregunta refleja la magnitud de la improvisación, mediocridad y torpeza en el manejo de la cuenca del Pilcomayo.

La administración actual de la Comisión Nacional del Pilcomayo, con el señor Artur Niedhammer a la cabeza aún tiene el beneficio de la duda, al igual que el ministro Arnoldo Wiens.

Las sucesivas administraciones, con honrosas excepciones como es el caso del Ing. Pánfilo Benítez, ministro de Obras Públicas durante la administración de Nicanor Duarte Frutos, fueron ineptas.

Y el Arq. Ricardo Riego, director de la Comisión del Pilcomayo en los últimos seis meses del gobierno de Horacio Cartes, luego de 15 años logró introducir el río al suelo patrio en temporada de aguas bajas, como sucedió hace unos meses.

Otra persona que trabajó duro fue el Ing. Carlos Couchonal quien en el año 2001 demostró que se puede limpiar 400 kilómetros de canal; gracias a ese empeño hasta hoy tenemos al río.

¿Y los demás?

No se sabe qué hacer

La Comisión Nacional del Pilcomayo tiene que reunir en su seno a los mejores científicos, técnicos y profesionales del país.

En el año 1992, el Ing. Luis Alberto Meyer procuró organizar un equipo de primer nivel.

El intento duró seis años hasta que finalmente el Ministerio de Obras Públicas tomó el control absoluto de la comisión nacional, hoy convertida en oficina de segundo nivel en el MOPC.

Mientras el Paraguay se limita a abrir mal que mal su canal, Argentina dispone de un sistema de control y distribución de agua junto con un reservorio de 400.000 hectáreas en el bañado La Estrella, provincia de Formosa.

El Pilcomayo, dentro de su canal, tiene una utilidad relativa. Las aguas son necesarias para producir, para regar campos, para permitir mayores y mejores oportunidades de trabajo para los pobladores chaqueños.

Y sobre todo se requiere que vuelva a General Díaz para allí conectarse con los ríos Verde, Montelindo, Negro, Confuso, que tienen su naciente en el fortín.

No hablamos de ciencia espacial, hablamos de la necesidad de trabajar por el Pilcomayo y el país.

roque@abc.com.py

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...