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De acuerdo a un informe elaborado por la binacional, lado paraguayo, con la implementación del nuevo sistema de transmisión se aligeraron los flujos de energía en los troncos de 220 kV, donde también se redujeron las pérdidas técnicas, optimizando a nivel de transmisión toda la operación del sistema interconectado nacional de la ANDE.
Agrega el reporte que antes de entrar en operación la línea 500 kV, la demanda pico de la ANDE era de 2.427 MW de potencia, mientras que, en el 2014 fue de 2.569 MW. El 13 de enero de 2015, esa demanda pico aumentó a 2.656 MW y así sucesivamente se llegó al 2017, cuando la demanda pico registrada el 8 de marzo fue de 3.026 MW. El aporte de la línea de 500 kV fue 774 MW, o sea hubo un aumento del 25% respecto al 2013.
El aporte de las instalaciones del sistema en 500 kV para mejorar el servicio fue determinante para atender la demanda a partir de su puesta en operación, considerando que la participación de los suministros de energía eléctrica de Acaray y Yacyretá se encontraba al límite de sus capacidades, desde tiempo atrás, resalta el informe de Itaipú.
“El alto índice de disponibilidad del sistema otorga un excepcional desempeño y una gran confiabilidad, permitiendo el aumento gradual del intercambio de energía Itaipú-ANDE por la LT 500 kV desde su puesta en operación, suministrándose actualmente cerca del 38% del consumo eléctrico al sistema interconectado paraguayo, llegando a transmitir un total acumulado superior a los 15.250.000 MWh”, señala en otra parte la entidad.
Cabe mencionar que según datos de la binacional, entre enero y setiembre de este año nuestro país retiró el 13,8% del total generado por la usina, lo que representa 23% del total de energía generada por las unidades de 50 Hz (paraguayas).
Rumbo al 2023
Por otro lado, la Itaipú también informó sobre el saldo de la deuda que mantiene con el Tesoro brasileño. Al respecto señaló que al 31 de octubre “llegamos a menos de US$ 9.000 millones de saldo de la deuda”.
Agrega que la administración actual recibió la entidad en el 2013 con una deuda de US$ 15.000 millones y “cumpliendo con el calendario de pagos nos proyectamos a deuda cero para 2023”. Concluye que el saldo de la deuda de la entidad baja al 31/10/17 a US$ 8.900 millones”.
Cabe mencionar al respecto que un dictamen de la Contraloría General de la República (CGR) de diciembre de 2010 declaró ilegal la deuda de US$ 4.194 millones avalada en 1997 por el gobierno de Juan Carlos Wasmosy. Con este argumento, se debía exigir una revisión de las cuentas al Gobierno brasileño.
Nunca se hizo ningún reclamo, ni siquiera luego de que el economista Jeffrey Sachs haya confirmado en 2012 que la deuda ya había sido saldada hace tiempo.