La Asociación de Propietarios y Operadores de Estaciones de Servicio y Afines (Apesa) sostiene que la incursión de Petropar como proveedor directo de combustible desde sus propias estaciones de servicio cambió radicalmente las reglas de juego y hay incertidumbre acerca de la suerte de las más de 2.300 estaciones de servicio privadas que operan en el país. En tal sentido, piden el establecimiento de una mesa de trabajo con miras a la creación de un ente regulador para el sector, que también se ocupe de la “salvaje proliferación”.
“Es necesario crear un ente regulador porque estamos ante una proliferación salvaje de estaciones de servicio, nadie ejerce un control eficiente. Petropar ‘hace’ de ente regulador, pero es necesario crear una institución para ese efecto”, dijo el actual presidente de Apesa, Alejandro Guggiari.
El mismo dijo que no se oponen a que Petropar comercialice directamente los combustibles, aun cuando pueda considerarse una competencia desleal, pero que es necesario establecer un diálogo para reducir la incertidumbre.
Según él, de las 2.300 estaciones de servicio que operan en el país, al menos 1.000 son explotadas por su propios dueños, es decir, no pertenecen a los grandes emblemas. “Son precisamente ellos (los pequeños) los más perjudicados con esta situación”, dijo en relación a la competencia que supone la provisión directa por parte de Petropar.
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Instó al ministro de Industria, Gustavo Leite, a tomar una posición más conciliadora en el asunto, considerando que en cada estación, según él, trabajan entre 12 a 20 personas, y a quienes también hay que considerar, argumentó.
Petropar apunta a duplicar servicentros
En contrapartida, la petrolera estatal se está preparando para duplicar la cantidad de estaciones de servicio en el país bajo su emblema, que hoy son 60.
Enrique Galli, director de gabinete de Petropar, sostuvo que no se consideran una amenaza para las pequeñas empresas del sector y según él, el mercado irá regulándose solo.
En cuanto al precio, indicó que cuando Petropar comenzó a ofertar su producto directamente al público había una diferencia de precios de hasta 30% menos con relación al sector privado, pero que hoy esa diferencia, según él, es imperceptible.
“Recordemos que el precio del gasoil, que constituye el 60% del mercado, se establece por decreto”, dijo.
Finalmente, alegó que hay sitios en los que se reclama la construcción de servicentros de la petrolera estatal, cuya presencia en el mercado de servicentros será del 5% del total antes de fin de año.
Municipios no controlan
Una cuestión que preocupa sobremanera a los directivos de Apesa es la falta de control por parte de los municipios. Según dijo Galli, la distancia de 1.000 metros entre una estación y otra se respeta solo en Asunción, pero también se refirió a un supuesto plan para derogar la ordenanza que establece esa regulación.