De acuerdo con la experiencia que se ha vivido en la región con la regulación de precios, no siempre ha sido un tema sencillo de aplicar y no siempre resultó favorable a los objetivos por el cual se implementaron. Como ejemplo citó un caso uruguayo que surgió con la implementación de topes a la tasa de interés para los microcréditos a fin de ayudar a los pequeños emprendedores a acceder a tasas más blandas. Sin embargo, el producto no tuvo la aceptación necesaria en el sistema, no hubo ofertas por parte de los bancos, y los microemprendedores tuvieron que recurrir a préstamos de consumo con tasas muy altas.
El economista uruguayo compartió la experiencia de su país en inclusión financiera a través de instrumentos como la tarjeta de crédito, durante su exposición en el Seminario Internacional del Card Meeting.
Tasas del 120%
El experto comentó que la tasa de interés al consumo (tarjetas) en Uruguay son bastante altas y puede llega fácilmente al 120%, dependiendo del promedio de la tasa activa (de los préstamos de consumo), pero que solo el 10% de los tarjeta habientes uruguayos recurren a ella para financiar.
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La mayor parte de los usuarios utilizan la tarjeta como medio de pago, ya que las necesidades de financiación son cubiertas por otros tipos de instrumentos financieros con tasas más blandas pero con mayores requerimientos.
Según el experto es preciso crear políticas públicas que incluyan incentivos fiscales, incluso subsidios a pequeños comercios, como también iniciativas de las procesadoras a fin de extender el uso de la tarjeta como instrumentos de pago. Si bien, estos incentivos impliquen un sacrificio fiscal en el corto plazo, el impacto final será mayor en las recaudaciones debido a una mayor formalización de las transacciones, afirmo.
Paraguay cuenta con cerca de 140.000 comercios, pero solo 23.000 cuentan con el dispositivo para operar con tarjetas de débito y crédito (POS). La penetración de pagos con tarjetas en Paraguay es una de las más bajas de la región, llega apenas al 8,8%, en caso de Uruguay llega al 14%, Argentina 20%, Chile 26 y Brasil 29%.