Reiteran en la prensa brasileña que Bolsonaro romperá acuerdo de 2009

Un suelto que circuló ayer en internet con el título de “Curto-circuito em Itaipú”, que “brasilagro” subió a su web el último jueves, cobró en estos días de celebraciones religiosas un fuerte carácter viral, porque anunciaba nada menos que el gobierno de Bolsonaro (Jair) rompería el acuerdo de 2009 con nuestro país.

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El material, de apenas 12 líneas, no fundamenta sin embargo su grave anuncio.

El pasado martes 10, día que fecharon el suelto de marras, víspera del encuentro de vicecancilleres y respectivas comitivas en el edificio de producción de la binacional, pronosticaba que “la intrincada renegociación del Tratado de Itaipú va a ganar aún más voltaje ... El gobierno Bolsonaro oficializará su posición de romper el acuerdo firmado en 2009 por los entonces presidentes Lula y Fernando Lugo”. 

Diez días después de la reunión, de la ruptura augurada por “brasilagro” nada se sabe. Deja vislumbrar empero que la causa posible de la ruptura sea “la cláusula ... que permite al Paraguay comprar el excedente de energía de la hidroeléctrica al precio subsidiado de US$ 6/MWh”.

No explica si es Itaipú o es su país el que subsidia, y menos aún el tipo de energía al que se refiere, la “excedente”. Tampoco informa sobre la cantidad que “compró” Paraguay de esta “categoría de energía” y cuánto aprovechó su país.

Lo intrincado de este suelto es el mensaje que busca transmitir: “en caso de que el acuerdo sea revisado, en la práctica Paraguay tendrá que volver a asumir íntegramente los costos referentes a la construcción de la hidroeléctrica” (¿?).

A finales de 2016, Jorge Samek, aún director general brasileño de Itaipú, declaraba –nunca fue desmentido– que el ente binacional cubre sus costos con 75.000 GWh, y que “tudo que produz a mais vem de desconto para o setor eléctrico brasileiro e paraguaio”. Luego, a la diferencia entre esta cantidad y toda la producción anual de Itaipú, algunos llaman excedente, Itaipú (RCA 020/02), “energía adicional a la energía garantizada”, y, lo más relevante, hasta en 2017, año en que la ANDE “abusó” de esta energía, solo pudo utilizar el 17,35% de la misma, y Brasil, el 82,65%.

Que en el mix entre la garantizada y la adicional le salga más caro al Brasil tiene una sola explicación: la cantidad que lleva de ambas categorías de electricidad.

El costo de construcción de la usina forma parte del costo de producción de Itaipú, que según Samek lo cubren con la generación de 75.000 GWh, por ende, también lo asume el consumidor paraguayo al recibir su factura mensual de la ANDE.

Leve aumento de la compensación

El 11 de mayo de 2011, el Senado brasileño aprobaba el Decreto Legislativo Nº 115, sobre las Notas Reversales que firmaron los gobiernos de entonces de nuestro país y Brasil. En líneas generales, los nuevos instrumentos diplomáticos aumentaban la “compensación” al Paraguay por ceder su energía en Itaipú al Brasil de menos de US$ 3/MWh a US$ 9,2/MWh sobre el costo de producción del ente binacional.

Ramón Casco Carreras

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