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El bajo desempeño de la agricultura, la industria manufacturera, la construcción y la generación de electricidad tuvo un fuerte impacto en la dinámica económica, que registró un resultado negativo (-4,6%) en el mes de marzo, según se puede observar en el informe que dio a conocer ayer el Banco Central del Paraguay (BCP).
Con esto, el Imaep acumula una variación de -2,8% al primer trimestre del año, indican los datos oficiales.
De acuerdo a las últimas estimaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el resultado desfavorable de la actividad agrícola se debió a menores niveles de producción de soja como consecuencia de la sequía, y en los últimos meses por las abundantes lluvias que están afectando a la variedad tardía. No obstante, algunos rubros presentaron variaciones positivas, como la producción de arroz, maíz y mandioca.
Por otra parte, la generación de energía eléctrica de las binacionales sigue afectada por el menor caudal hídrico del río Paraná, según el informe técnico. Además, la actividad de la construcción también mostró una disminución debido principalmente a las condiciones climáticas adversas, que obstaculizaron la normal ejecución de las obras.
Dentro del rubro de manufactura, las actividades con rendimiento desfavorable fueron la producción de carne, bebidas y tabaco, aceite, químicos, las industrias relacionadas con la construcción (minerales no metálicos y metales comunes), textiles y prendas de vestir y productos lácteos.
Ventas también cayeron
El indicador de ventas también acumula bajas en su desempeño, según se puede apreciar en el Estimador Cifras de Negocios (ECN). La caída registrada en marzo es del 7,6%.
Este comportamiento negativo del ECN responde a las retracciones registradas en las ventas del sector manufacturero, comercio y servicios, según el reporte de la banca matriz.
Con este resultado, dicho indicador acumula una variación de -2,0% a marzo último. Según el informe, en la rama industrial registraron comportamientos negativos las ventas de bebidas y tabaco, aceites, lácteos, productos metálicos, metales comunes, madera, molinería y panadería.
En el comercio mostraron variaciones adversas las ventas de vehículos, combustibles, prendas de vestir y equipamiento del hogar. Finalmente, el sector servicios atenuó estas caídas, con ventas favorables en los servicios a hogares, telecomunicaciones e inmobiliarios.