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“Este es el verdadero cuello de botella que debe resolver el país para capitalizar recursos humanos de las próximas décadas. Si no se hace nada al respecto se los estará condenando a la pobreza”, advirtió Rafael de Hoyos, economista de práctica global de Educación del BM. El experto dijo que la calidad educativa es posible con el uso de esquemas más eficientes, y sin tener que depender de más recursos monetarios para hacerlo. Paraguay gasta US$ 1.000 por niño pero su eficiencia educativa alcanza al 15% del estudiantado, en Perú con igual inversión, 35% recibe una educación de buena calidad, detalló el experto.
Al respecto, el ministro de Educación, Eduardo Petta, indicó que la cartera es consciente de esta situación y que por tal motivo se está realizando fuerte apuesta a la tecnología como un aliado en la metodología del aprendizaje y el uso de didácticas educativas que permitan una mejor comprensión desde la educación primaria.