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JUAN DE MENA, Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). En febrero del 2010 se hizo la palada inicial para la pavimentación tipo empedrado de este camino, obra cuyo contrato fue adjudicado en uno de los tramos (Cleto Romero-Carayaó) a la firma Inducon SA, por G. 17.000 millones y un plazo de 24 meses, con posibilidades de extenderlo a 36 meses. Los trabajos solo avanzaron tres kilómetros en cinco años, y en el 2015 se rescindió el trato por incumplimiento.
En cuanto al tramo Cleto Romero-Regina Marecos, de 22,5 kilómetros, la contratista era el consorcio Vielk, representado por Enrique Barrail.
Los trabajos debían finalizar el 20 de diciembre de 2016, pero tuvo un cambio en el paquete estructural, para luego ser rescindido.
En mayo del 2017 el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) adjudicó al Consorcio Yhaguy, representado por Sergio Samudio, la pavimentación asfáltica del tramo de 78 kilómetros, en un solo paquete, abarcando así todo el trayecto (Carayaó-Cleto Romero-Colonia Regina Marecos-Juan de Mena-Ruta 3), por G. 86.212.164.036. La obra debe estar concluida en enero del 2019.
Sin embargo, nuevamente el empedrado no ha tenido avances sustanciales, llegando apenas a unos seis kilómetros y el tramo enripiado se encuentra intransitable, especialmente en días de lluvia.
En una visita a la zona de obras se pudo constatar que apenas uno o dos obreros se encontraban trabajando en el sitio. La obra avanza muy lentamente y la calidad es pésima. Si bien existen tramos de empedrado que facilitan el tránsito, otros sectores del camino son prácticamente intransitables, sobre todo durante los días de lluvia.
El mal estado de esta ruta perjudica directamente a los vehículos. El propio intendente de Juan de Mena, Julio César Antúnez (PLRA), contó que la semana pasada dos cubiertas de su camioneta se destruyeron luego de transitar por esta vía a causa de las piedras puntiagudas, una situación que sufre la mayoría de los automotores que circulan por este corredor.
Por otro lado, el intendente dijo que no cree en algunas de las nuevas promesas que hace el MOPC, en el sentido de que se asfaltaría esta ruta. No se ocupan de mantener la vía de acceso a la ciudad, de solo de 17 Km. y que está en pésimas condiciones, menos aún asfaltarán zonas que están en condiciones desastrosas, alegó.
¿Una nueva tecnología?
Según el MOPC, en el “corredor de la producción” se aplicará una nueva tecnología: la implantación de geomallas, por ser una zona baja. Son mallas que se colocan en la parte estructural del pavimento para darle más capacidad de soporte. Dicen que conforme al cronograma de obras, eso se hará en agosto próximo.
Sin embargo, pobladores de la zona afirman estar cansados de las excusas del MOPC. Tras ocho años ya no creen en las promesas de inicio de asfaltado que anuncian cada tanto, pero nunca llega.