Subjefe con edificio también ubicó a su hijo en puesto clave de Aduanas

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“Carlitos” Vázquez Delgadillo, conocido corredor de motos, se privilegió con la influencia de su afortunado padre, Carlos Anuncio Vázquez Aguilera, y accedió a un puesto sin concurso de méritos en Aduanas, institución donde su papá se volvió un extraordinario “mago” de las finanzas, acumulando bienes por US$ 2 millones con un sueldo que hasta el 2010 rondaba los G. 3 millones.

El afortunado subjefe aduanero Carlos Anuncio Vázquez, quien amasó US$ 2 millones cuando su salario apenas rondaba los G. 3 millones en el 2010, aprovechó sus influencias y ubicó en la institución a su hijo Carlos Emerson Vázquez Delgadillo, conocido corredor de motos.

Padre e hijo son subjefes de Valoración, uno de los cargos más apetecibles dentro de Aduanas, ya que aquí se determina el valor de las mercaderías para el tributo de las importaciones.

En los registros publicados por la institución figura que “Carlitos” ingresó en el 2008 y no existen rastros de un concurso de méritos para su incorporación, requisito ineludible para el común de la gente que busca una oportunidad laboral en el sector público.

De esta forma “Carlitos” se adhiere a la corporación de hijos de capos aduaneros que heredan apetitosos cargos en la institución, como Alan Guanes, Richard Ferreira Da Costa, Osvaldo Molinas Stete, Elvis Carrera, Luis Pintos, Adolfo Almirón y otros afortunados.

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Vázquez padre e hijo hoy perciben un salario de G. 9,3 millones como subjefes de Valoración. Llamamos varias veces a “Carlitos” y le enviamos mensajes para conocer sobre su incorporación y los méritos que lo convirtieron en subjefe aduanero, pero no respondió.

Cabe recordar que el papá Vázquez tiene en su haber una imputación por enriquecimiento ilícito en el año 2002, que logró zafar gracias a un embargo judicial, según consta en los archivos periodísticos.

Nuestro diario ya puso en evidencia, por ejemplo, viajes, compras en el exterior con tarjeta Visa de oro de la esposa de Vázquez, María Graciela Delgadillo de Vázquez, cuando el ingreso familiar era de apenas G. 2 millones. Los Vázquez se pasean en vehículos de alta gama, los hijos tienen su propio negocio sin referencias de trabajo formal que les haya generado el capital para invertir.

Un edificio de aproximadamente US$ 1 millón, una casaquinta de unos US$ 450.000, una coqueta residencia de alrededor US$ 300.000, flota de lujosos vehículos, vacaciones en lugares paradisiacos, son parte de las ostentaciones de los Vázquez con un moderado salario.

rossana.escobar@abc.com.py