Superviaducto arrancó a medias por diferencias con la Municipalidad

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Ayer se inició finalmente el superviaducto de Madame Lynch y Aviadores del Chaco, aunque no al ritmo que se esperaba, pues la Municipalidad de Asunción no permite aún utilizar las calles alternativas, hasta que no concluyan todas las tareas de mejoramiento. Hay versiones de que el jefe de Gabinete de la Comuna y exviceministro del MOPC en el gobierno liberal, Max Rejalaga, intentaría boicotear el proyecto.

La obra emblema del Ministerio de Obras Públicas en Asunción, el superviaducto de Aviadores del Chaco y Madame Lynch, comenzó ayer, aunque sin el movimiento de obreros y máquinas que se esperaba.

Apenas se establecieron los límites de una suerte de “rotonda” en el centro del cruce y los trabajos preliminares al cambio en el sentido de la circulación.

El viceministro de Obras, Manuel Cano, explicó que el tráfico se desviará hacia las vías alternativas según la demanda, más adelante.

Llamativamente, ayer, día en que arrancaron los trabajos no hubo un solo funcionario de la Municipalidad de Asunción acompañando a la comitiva del Ministerio y de la contratista de la obra, la española Corsan-Corviam.

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Al respecto, el viceministro Cano manifestó que “están en permanente comunicación con la Municipalidad de Asunción y que el municipio se ha mostrado abierto y colaborativo”, con lo que trató también de desmentir los rumores que hablaban de un supuesto boicot de la Comuna a la obra, por diferencias partidarias con las autoridades del MOPC.

Supuestamente el jefe de Gabinete de la Comuna, Max Rejalaga, intenta demorar el inicio de las obras como una suerte de “vendetta” por los ataques de las actuales autoridades del Ministerio contra el predecesor Salyn Buzarquis, de quien Rejalaga fue viceministro de Obras.

Intentamos obtener la versión del ahora funcionario de la Comuna, pero dijeron que se encuentra fuera del país.

Plazo hasta diciembre

El plazo contractual para esta obra es de 12 meses, que corre desde diciembre del año pasado, cuando el Ministerio de Obras Públicas dio la orden de inicio de los trabajos.

Supuestamente, mientras transcurría el 25% del plazo, la contratista ha trabajado en su campamento, ubicado a unos 200 metros del cruce, en la elaboración de unas piezas prefabricadas que serán montadas en breve.

La obra tiene un costo de G. 125.000 millones (más de 23 millones de dólares) para el Ministerio de Obras Públicas y en teoría debe producir a largo plazo un ahorro de 400 millones de dólares a la población, según un estudio de la empresa Tecnodinámica, en el que se analizaron diversas variables, como el uso de combustible, por ejemplo.