Hace poco más de un mes, el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) anotó en los Registros Públicos y Catastro una cuestionada mensura judicial sobre Barbero Cue, que en lugar de arrojar las 17.343 hectáreas que dice el título de propiedad, había dado como resultado apenas 14.090 hectáreas.
Ante los duros cuestionamientos de campesinos, que amenazaron con llegar a una demanda internacional, la administración del ente prometió elaborar un informe técnico, de modo a decidir si corrige dicha inscripción. Después de semanas, aún no terminan ese trabajo.
Víctor Caballero, titular de la comisión vecinal “Un Pedacito de Italia”, afirmó que el ente tiene todos los documentos y que no hay motivos para seguir retrasando la exhibición de las conclusiones. “No entendemos por qué dilatan tanto el informe sobre Barbero, teniendo un sistema de última generación para hacer el trabajo. Nosotros vimos que en dos horas los técnicos determinaron la superficie exacta de las tierras”, dijo.
Agregó que los labriegos esperan que el actual presidente de la institución, Justo Cárdenas, no actúe como el anterior, Luis Ortigoza, quien primero hizo un juicio para rematar la colonia, reconociendo que esta tiene 17.343 hectáreas, pero posteriormente, en otro proceso, inició la cuestionada mensura, que arrojó como resultado las 14.090 hectáreas y que hasta hoy sigue perjudicando a los donatarios de las tierras.
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La abogada de los campesinos, Leticia Almada Paoli, sostuvo que ningún colindante de la colonia ha exhibido título sobre la propiedad, identificada como finca 231 padrón 682 de San Pedro de Ycuamandyyú. “Esta finca no ha sufrido modificación en su superficie y en su dominio desde su origen.
Pero algunos ‘manguruyuses” usan documentos conocidos en el mundo notarial como ‘títulos con rueditas’, para moverlos a voluntad y superponerlos a conveniencia. El Indert debió decir la verdad hace años sobre la colonia, basándose en todas documentaciones fidedignas que contiene nuestro expediente, y no centrarse en intereses de colindantes, en cuyas propiedades seguramente encontrarán irregularidades, simulaciones y documentos apócrifos”, aseveró.
Proceso lento, que requiere de Registro Público
De acuerdo con los datos del Indert, el informe sobre la colonia está a cargo del Sistema de Información de Recursos de la Tierra (SIRT), que está relevando y analizando los antecedentes dominiales de la Colonia Barbero y sus colindantes. “Este es un proceso lento, ya que las distintas dependencias públicas y privadas donde se encuentran (estos datos), no exhiben con la celeridad necesaria los documentos requeridos. Es un trabajo minucioso que se está realizando con todo el rigor técnico que se requiere para concluir en un informe final con resultado fidedigno”, señala un breve informe enviado por la Dirección Jurídica del ente.
El asesor del SIRT, Hugo Jiménez Recalde, aseguró que no están dilatando los resultados del informe y argumentó en los mismos términos que la Dirección Jurídica. “Dependemos de otras instituciones, como la Dirección General de Registros Públicos, donde solo pueden exhibir 5 expedientes por día, por escribano, y previo pedido de exhibición documental, con 15 días de anticipación. Hace más de un año planteamos un acuerdo vía Corte Suprema de Justicia para acceso virtual a sistemas de Registros, donde están los asientos registrales en formato digital, pero no tuvimos respuesta favorable hasta ahora”, indicó.
Los campesinos advirtieron que si el informe del SIRT es insatisfactorio, iniciarán acciones para defender sus derechos, pues aseguraron tener pruebas fehacientes sobre las ocupaciones ilegales en Barbero Cue y que se ha pretendido favorecer a las mismas.