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Una de las explicaciones de la masiva contratación de funcionarios por parte de la compañía telefónica móvil estatal que dio su actual presidente, Rogelio Benítez, es que la empresa tiene un call center que atiende el 160, reclamo de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), por la suma de US$ 140.000 al mes.
El año en que Vox pasó a manos del Estado, contaba con alrededor de 300 funcionarios. Actualmente, tiene unos 650 empleados. En cuanto a líneas telefónicas vendidas, de 250.000 en 2010, hoy tiene unas 400.000. Casi las duplicó.
Calculando la cantidad de líneas y funcionarios, encontramos que la telefónica estatal tiene poco más de 600 funcionarios por cada línea. No hay datos de cuántas líneas están activas.
Además, Vox compite por el tercer lugar en el mercado con Claro, que tiene unas 450.000 líneas telefónicas, con apenas 300 empleados, según datos del 2012.
Firmas privadas
Las dos operadoras telefónicas más importantes, Tigo y Personal, tienen menos empleados y más líneas vendidas. Por ejemplo, Tigo tiene 500 empleados y poco más de 3,5 millones de líneas (unas 7.000 líneas por cada empleado); mientras que Personal posee 400 empleados y más de 2,7 millones de líneas (alrededor de 6.700 líneas por cada empleado).
Ambas empresas privadas de telefonía móvil ocupan los primeros lugares en la lista de grandes contribuyentes de la Subsecretaría del Estado de Tributación (SET), de Hacienda.
El argumento del masivo ingreso de funcionarios en Vox es que ofrece el servicio de call center de la ANDE. Solamente en ese sector, las sucesivas administraciones contrataron alrededor de 330 personas, porque deben atender tres turnos (mañana, tarde y noche), dicen. También atienden los reclamos de Copaco y Vox. El plan es también prestar el servicio de call center al Instituto de Previsión Social (IPS), según el presidente de la compañía telefónica estatal.
No quieren publicar la nómina de empleados
La administración de la telefónica celular no publicará la nómina de sus funcionarios así como hizo con la de Copaco, con el argumento de que las “competidoras sabrán los nombres e ingresos de los técnicos y podrían robarlos”.
La Compañía Paraguaya de Comunicaciones (Copaco), propietaria de Vox –que está al borde de la quiebra a causa de los grandes negociados en compras de tecnología y la cantidad excesiva de funcionarios– apenas tiene 390.000 líneas telefónicas y debe soportar la carga de alrededor de 5.000 funcionarios. Haciendo los cálculos, encontramos que tiene unos 78 funcionarios por cada línea telefónica.
Es más, Vox y Copaco tuvieron que solicitar un préstamo de US$ 12 millones el año pasado, y están planificando otro préstamo de US$ 6 millones para cumplir con el contrato firmado con la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) para ampliar su red de fibra óptica, mediante un subsidio de US$ 10 millones del Fondo de Servicios Universales (FSU).