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SAN LORENZO (Antonia Delvalle C., corresponsal). El juicio oral se realizó en el Palacio de Justicia de esta ciudad. El tribunal de sentencia está integrado por Julio Granada, Óscar Rodríguez (presidente) y Letizia de Gásperi.
La denuncia había sido presentada en el año 2017 por la entonces coordinadora de la pastoral juvenil de Limpio, Alexa Torres.
El defensor del sacerdote Silvestre Olmedo, abogado Rodrigo Yódice, presentó incidentes con intención de eliminar varias pruebas propuestas por los fiscales Luis Chamorro y Claudia Aguilera (coadyuvante), así como por la querella representada por la abogada Sonia Von Leppel. El tribunal de sentencia rechazó todos.
Luego, el abogado Yódice presentó recusación contra el tribunal de sentencia. Argumentó parcialidad manifiesta de los magistrados y dijo que “básicamente este juicio se ha convertido en procedimientos propios de una inquisición”.
Varios curas y el arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela, se presentaron para declarar a favor de Olmedo, pero no pudieron hacerlo debido a la suspensión del juicio.
Los pedidos
La defensa del sacerdote solicitó la exclusión de una computadora que tendría un audio en el que supuestamente se lo escucha a Olmedo admitir haber tocado los senos de la víctima, sin su consentimiento. Además, pide un nuevo test psicológico a la víctima y algunos informes. También requiere que se rechace el pedido de pericia psiquiátrica al cura, aduciendo que nadie puede declarar en su contra.
La querella y los fiscales solicitaron al tribunal que sean rechazados los incidentes porque ya fueron resueltos en la etapa preparatoria, fase en la que, alegaron, la defensa no pidió desestimar. El tribunal, tras dos cuartos intermedios, se mantuvo en su postura de no hacer lugar a los incidentes.
Manifestación
Frente al Palacio de Justicia de San Lorenzo, un grupo de personas se manifestó para exigir que cese el acoso de sacerdotes y para expresar apoyo a Alexia Torres por su valentía al emprender un litigio judicial contra el cura Silvestre Olmedo, pese a las presiones de la comunidad católica de Limpio. Además, criticaron al arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, por haber “minimizado” las denuncias cuando le pidió a la víctima que “no haga una montaña de una piedrita”. Exigieron también justicia en el caso de un sacerdote acusado por pedofilia.